Una denuncia importante, la que hace Alejandra de la Fuente, en este artículo señalado en PÚBLICO por el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado. De la Fuente nos cuenta de otra faceta de la maldita picaresca empresarial en este reino de Felipe el último y, apoyándose en la laboralista Silvia Gambarte, advierte de la gravedad de este delito. Yo, Chema Tante, he repetido muchas veces que el neoliberalismo, tan perjudicial en todas partes, es mucho más grave en estas sociedades nuestras. Porque, por ejemplo, en la Europa del Norte, se toman medidas fuertes, pero al menos, las empresas cumplen con la ley y los gobiernos vigilan su cumplimiento. En cambio, en estos sures, las empresas siempre están dispuestas a rizar el rizo y crujir un poco más, a sus fuerzas de trabajo, y al estado. Y, como un perjuicio colateral, en el Norte no se asume que para nuestras trabajadoras y nuestros trabajadores las medidas neoliberales son todavía más pesadas, por la codicia y la crueldad de tantas empresas.
Yo lo siento mucho por Irene Montero, a quién considero persona bienintencionada, igual que a Pablo Iglesias y Alberto Garzón y a Yolanda Díaz. Pero su cacareado triunfo, por el cuál le rascaron la leva a Felipe el último, eso de los 950 euros de salario mínimo, es una filfa. Es una subida que igual lo hubiera hecho Sánchez con Casado. No hay tu tía con ese dinero no se sale adelante, en la cuarta economía de Europa. Este estado español se las echa continuamente con sus éxitos económicos, con esos millones de turistas que recibe. Pero todo el beneficio de tanta actividad empresarial, se las lleva, como de costumbre, el capital. Eso no lo hacen los estados avanzados. Pablo Rodero lo cuenta desde 20 MINUTOS, con una facilidad pasmosa. Simplemente, preguntado a la gente que curra por el salario mínimo, que qué le parece la subida. Y, encima, ya se han sacado las empresas las argucias legales que le proporciona tener a los tribunales de su lado, para que esa subida se quede en menos que nada.
Lo cuentan en EL DÍA o FINANZAS, a partir de una nota de EFE sobre el informe de ADECCO. Algo que por cierto, se repite año tras año, de todos estos años, van para cuarenta, que gobierna en Canarias el partido del genuflexo Clavijo. Y, por supuesto, en estos más de dos años que ese machango ocupa su puesto después de perder las elecciones, para mostrar al final la misma incapacidad para resolver el problema. Y eso que todos estos años, la actividad económica en Canarias ha crecido significativamente. Y eso que la tropa política que ahora lidera el genuflexo Clavijo, al servicio de la tropa empresarial, ha inundado las islas con 16 millones de turistas. Par que no queda nada, Canarias está en el penúltimo lugar, en cuanto a salarios. Y no hablemos del paro. En definitiva, tanto choni en las islas no sirven para darle empleo decente a la gente canaria. Claro que es significaivo ver que en Canarias es en dónde menos huelgas se hacen. Por supuesto, porque la amenaza del despido, el paro y la miseria es muy fuerte. Pero el genuflexo Clavijo sigue tan privado. El muy ruin.
El consejero de Los Realejos se incorporó como asesor a la Secretaría de Plurinacionalidad de Podemos en un momento clave en la historia de las tensiones territoriales en España.
Viendo el origen de la palabra trabajo, se entienden muchas cosas. La Etimoligia de la palabra trabajar, viene de Tripalium, tres palos, yugo con el que azotaban a los esclavos.
Francisco Morote, de ATTAC Canarias, recomienda este artículo de Alejandro Nadal en el digital mexicano LA JORNADA, comentando la inanidad voluntaria del G20, que parece haberse rendido a la impotencia de influir en la economía mundial. Es que el neoliberalismo no acepta que le digan lo que tiene que hacer.
Raúl Sánchez ofrece en EL DIARIO esta interesante información que recomienda Antonio Aguado