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viernes, 26 de abril de 2024 22:20h.

Izquierda Unida Canaria – Los Verdes presenta alegaciones a la regasificadora de Granadilla.    

“El Estudio de Impacto Ambiental es un documento desastroso y sesgado, que solo pretende favorecer la introducción del gas sin tener en cuenta los verdaderos peligros que supone, ni las alternativas más económicas y ecológicas disponibles en Canarias”.

Izquierda Unida Canaria – Los Verdes presenta alegaciones a la regasificadora de Granadilla.    

“El Estudio de Impacto Ambiental es un documento desastroso y sesgado, que solo pretende favorecer la introducción del gas sin tener en cuenta los verdaderos peligros que supone, ni las alternativas más económicas y ecológicas disponibles en Canarias”.

Izquierda Unida Canaria – Los Verdes ha presentado hoy, ante la Dependencia del Área de Industria de la Subdelegación del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, una batería de alegaciones contra el estudio de impacto ambiental y la instalación de una planta regasificadora en el Puerto Industrial de Granadilla. Dichas alegaciones están basadas en el trabajo previo de la Plataforma contra el Puerto de Granadilla, y vienen a incidir en una serie de aspectos que desde IUC se consideran muy preocupantes.

IUC-LV ha advertido que no se cumple la distancia mínima de 2.000 metros entre la futura instalación y las zonas habitadas más cercanas, lo que va en contra de la legislación y supone un peligro para los vecinos y vecinas. Asimismo, insisten en que existen deficiencias importantes en el estudio de seguridad, que no aporta datos ni información concreta de los efectos de los posibles accidentes de la planta regasificadora, algo esencial, ya que casi todos los años hay accidentes relacionados con el Gas Natural en el mundo.

De producirse un accidente grave, la forma que adoptaría la nube de gas incendiado sería la del típico hongo, y hasta seis kilómetros de la planta regasificadora los efectos serían devastadores para la población, con elevadísimos índices de mortalidad. Así, este riego existiría para las poblaciones de El Médano, San Isidro, Barranco del Rio, La Caleta, San Miguel de Tajao, La Jaca, Las Listadas y Chimiche. También se verían muy afectadas las poblaciones de El Río, Granadilla de Abona, Charco del Pino, La Tejita  y La Mareta. En todas ellas, los índices de mortalidad serían muy elevados. Además las pérdidas económicas del sector turístico serían irrecuperables.

Por este motivo, que las consecuencias de un accidente grave en la planta se oculten o se minimicen en el proyecto presentado, afirmando que el área de impacto se reduce a 500 metros de la explosión, (cuando un cálculo realizado por el Ministerio de Trabajo afirma que la explosión de un depósito de Butano de 200 m3, tendría un diámetro de 273 metros y una altura de 204 metros) nos parece cuanto menos temerario.

Por otro lado, IUC-LV también advierte en sus alegaciones de la inviabilidad operativa del Puerto de Granadilla para las operaciones de navegación de los barcos con gas, debido a las condiciones climáticas de la zona. La zona donde se prevé la instalación de la planta Regasificadora es un lugar donde la fuerza del viento hace imposible la maniobrabilidad de buques de peso. Según el viento de la zona, y si se cumple la normativa de plantas similares ubicadas en la península, el puerto estaría operativo para los barcos metaneros un 31,08% de días al año en horario de día, y para el horario nocturno, solo podría autorizar la navegación un 17,04% de días del año.

En IUC-LV ignoramos los criterios de rentabilidad que tiene la empresa ENAGAS, pero que prácticamente de cada 10 días, 7 esté el puerto cerrado a la entrada, atraque y salida de los barcos que suministrarían el gas, nos ofrece serias dudas sobre la viabilidad técnica y financiera del proyecto. Otra cuestión sería que se pretendan obviar estas medidas de seguridad y que, por ende, la vida de un canario valga menos que la vida de un ciudadano de la península en cuanto a las medidas de seguridad se refiere.

Por último, IUC-LV también incide en las omisiones e informaciones erróneas  que contiene el proyecto para justificar la introducción del gas, sin tener en cuenta las distintas alternativas existentes. El gas natural es una energía fósil más, y su implantación frenaría el desarrollo de las energías renovables. Es falso que el gas natural no produzca emisiones de CO2 a la atmósfera.

En Santa Cruz de Tenerife, a 28 de Agosto de 2015