IU critica que se presten centros ciudadanos para ver partidos del mundial de fútbol

Izquierda Unida considera que el Ayuntamiento tiene  un doble rasero para gestionar estos centros y que esta medida perjudicará al pequeño comercio

Izquierda Unida (IU) en La Laguna ha mostrado su malestar tras conocer que el Ayuntamiento de La Laguna cederá centros ciudadanos para visualizar partidos del mundial de fútbol. Para la formación de izquierda, el problema radica en que los centros ciudadanos no se están cediendo con tanta facilidad para cualquier vecino o vecina del municipio que lo solicite, teniéndose incluso que explicar detalladamente el tipo de actividad a realizar. En cambio, si se permiten estas actividades que llevan asociadas un gasto complementario a la propia actividad de cada centro. Está formación no entiende, por tanto, como se puede negar un espacio para una reunión donde se hablara del PGO, como pasó recientemente, pero en cambio si se permite el uso de estos espacios para ver partidos de fútbol.

Además para IU, el Ayuntamiento ha quedado en evidencia con este asunto, ya que siempre ha defendido que no se puede regularizar la venta ambulante porque se incurriría en una competencia desleal con el resto de comercios, pero en este caso si cederá el espacio e incluso la cocina (como ocurre en el caso del centro ciudadano de San Matías) para la visualización de los partidos del mundial de fútbol, mientras los bares de la zona que pagan sus impuestos y que esperan con ansias este tipo de acontecimientos para obtener ingresos ante la falta de medidas institucionales que los ayuden, se quedan sin un público potencial.

Para Izquierda Unida este tipo de iniciativas no son más que otra de las tantas medidas de lavado de imagen que el Ayuntamiento de La Laguna pone en práctica  con el claro objetivo de recuperar crédito político dentro del municipio, tras haberlo perdido por hacer políticas de espaldas a la ciudadanía.

Por último esta formación invita a reflexionar al Gobierno local, sobre si su modelo de gestión de los centros ciudadanos pasa por limitar el debate de la ciudadanía en ellos para permitir eventos llenos de insultos y poco inspiradores para la juventud.