A la historia de El principito le faltaba un cachito
Como sin duda la gente republicana tenemos mucha más sensibilidad, mucha más capacidad de emocionarnos por la belleza de las cosas sencillas, se da la paradoja de que entre nuestros emblemas culturales se encuentre una dignidad monárquica: un pequeño principe, al que amamos. Porque nosotros y nosotras preferimos que los príncipes y los reyes se queden en el mundo de la fantasía.
05 de mayo de 2012 (01:21 h.)
Para demostrar la certeza de esta paradoja de que hablo, coloco en primer lugar de los enlaces que les propongo el de LA REPÚBLICA.
Nos cuentan esta historia amable de que se ha encontrado dos páginas manuscritas de Antoine de Saint-Exupéry (1900-1944), una de las cuáles contiene un fragmento que no se había incluido en el texto publicado. Me encanta.
http://www.larepublica.es/2012/05/encontradas-por-casualidad-dos-paginas-ineditas-de-el-principito/
http://www.publico.es/culturas/431967/las-aventuras-ineditas-que-extravio-el-principito
http://cultura.elpais.com/cultura/2012/05/04/actualidad/1336130508_600561.html
http://www.artcurial.com/en/asp/fullCatalogue.asp?salelot=2130+++++384+&refno=10383852