La película "La gran apuesta", o cómo hacer quebrar a la banca con su propio veneno (Marco Antonio Moren)
Una crisis brutal que, en principio puede que sí fuera crisis, pero -lo digo yo, Chema Tante- que rápidamente se transformó en una depresión que indujeron los poderes económicos mundiales, para llevarse por delante tas libertades ciudadanas, derechos políticos y condiciones laborales que se habían conseguido a lo largo de dos siglo de luchas.
Las mentiras de un sistema desquiciado
La película es precisa en la trayectoria histórica de los acontecimientos. Por un lado, estos cuatro personajes detectan las falencias de un sistema que se hizo totalmente fraudulento y, por otro, la voz de la corriente dominante, encabezada por el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, afirmando que "la economía está sana y que no existe ninguna burbuja a la vista". Tras cada palabra de Greenspan los mercados bursátiles se disparan y la burbuja se sigue hinchando.