ENAGAS anuncia que para finales de 2015 iniciará la instalación de la peligrosa planta de regasificación en Granadilla. Pero, dentro de la maldad de la noticia, con las declaraciones del presidente gasero sobre el tema, se confirma que todavía existe un margen de esperanza, para salvar a Canarias del contaminante, tóxico, caro y de complicado abastecimiento combustible fósil, el gas. Se mantiene el resquicio de posibilidad de que Canarias pueda aprovechar sus excepcionales condiciones para implantar renovables. 

Recordemos que con gas, no hay posibilidad de renovables en las islas. Como demuestra el profesor Roque Calero, la debilidad competitiva del gas frente a las energías limpias hace que solamente con una actuación política que frene la operación de renovables se consigue que el combustible fósil gaseoso sea rentable. Por otra parte, también cuestiones técnicas, como la inflexibilidad de los procesos del gas lo hacen incompatible con las tecnologías limpias de generación energética.

No entraré ahora, más que para hacer patente su falacia, en esos cientos de puestos de trabajo y el ahorro de emisión de gases contaminantes que, según la voz interesada, supondría utilizar el gas. Todas las declaraiones en ese sentido se derrumban si, en lugar de comparar el gas con su hermano fósil, el petróleo, se hace con las renovables.

En las declaraciones del presidente gasero veo que dice dos cosas trascendentales. Una, que "Tendría poco sentido socioeconómico tener una regasificadora en Tenerife y no en Gran Canaria". Dicho en cristiano, que si el gas no opera en las dos islas, no hay negocio. Y la otra cosa dicha por el del gas es que "en Gran Canaria, se mantiene la incertidumbre sobre la ubicación de la planta, que no se resolverá hasta después de las elecciones autonómicas". Es decir, que la aquiescencia política es imprescindible para darle para adelante al proyecto de regasificadora en tierras canarionas. Parece que el presidente gasero se las promete muy felices, con los resultados electorales de mayo. A éste le han  contado mal lo que ocurre en las islas.

Y ahí está la clave del futuro de Canarias. La posibilidad de cerrarle el paso al gas y de aprovechar las extraordinarias ventajas de las tecnologías limpias, pasa por el triunfo de las opciones políticas que han demostrado sentido de la lógica y que tienen sensibilidad medioambiental. 

La soberanía energética, el desarrollo económico y la preservación ambiental en Canarias se ventila en las elecciones de mayo. Esto no es cosa de broma.

http://www.canarias7.es/articulo.cfm?id=368997

http://eldia.es/tenerife/2015-03-18/6-obras-regasificadora-Tenerife-empezaran-segundo-semestre.htm