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miércoles, 24 de abril de 2024 15:02h.

Esta España maltratada... - por Nicolás Guerra Aguiar

 

FRASE NICOLÁS

 

FOTO NICOLÁS DIARIO SUR

Esta España maltratada... -por Nicolás Guerra Aguiar *

Si despilfarrar significa ‘derrochar el dinero y los bienes’, un respetable número de instituciones oficiales españolas cumple al pie de la letra la función despilfarradora.  

   A pesar de su irrelevancia algunas vienen de atrás porque sirven a los partidos para colocar a los afines, acallar conciencias ajenas, agradecer favores, regalar placenteros retiros o atrincherar a ciertos personajes en  instituciones como el Senado, por ejemplo, absolutamente inservible y costoso: 54 113 620 euros (año 2018). 

   Hay Comisión de Turismo en Congreso y Senado; existe el  Ministerio de […]  y Turismo; las comunidades tienen consejerías correspondientes; diputaciones y cabildos no son menos; los ayuntamientos tampoco… ¿Y qué hacen sus asalariados… si no hay turismo? Sospecho que ensoñaciones, como el 90% de los diputados durante marzo y abril: cobraron 1900 euros extras mes tras mes los no residentes en Madrid (algo menos los afincados)… aunque solo el 10% restante de sus señorías asistía al Congreso. 

   Más: si tanto se habla de racionalizar, ¿no le tintinea, estimado lector, aquella sentencia quijotesca de “La razón de la  sinrazón que a mi razón se hace” cuando leemos que el Parlamento andaluz deniega a la diputada señora Rodríguez su solicitud de renunciar a dietas durante el permiso de maternidad? (Lo razono y lo entiendo: se llama afán de protagonismo de la parlamentaria. Peligro: empiezan por reducir sobresueldos y puede terminarse en la obligatoriedad de justificar fehacientemente gastos ajenos a la actividad representativa.) 

LA RAZÓN TERESA

   La República italiana, con trece millones más de habitantes que España, reducirá 345 señorías. Su Cámara de Diputados superará al Congreso español en cincuenta miembros… pero elimina sesenta y cinco senadores. Fue la decisión apoyada por la mayoría de los votantes en el pasado referéndum, setenta y cuatro años después de otra consulta  que expulsó a la Casa de los Saboya, institución monárquica iniciada en el siglo XI. 

REFERÉNDUM ITALIAREFERÉNDUM ITALIA MMONARQUÍE

 Son los inconvenientes -inquisitoriables, por supuesto- del sistema democrático, sobre todo si desestabilizan la relajación de quienes viven a costa de. Pero quizás la reducción de señorías, consejeros, directores generales, asesores... y de paso, la democratización para acceder a la Jefatura del Estado y su control económico, podrían significar un importantísimo ahorro para los tiempos actuales e inmediatos, negros, negrísimos, nigérrimos, rigurosamente flagelantes sobre millones de españoles: el desempleo entre los jóvenes se acerca al millón, dos de cada cinco. 

   No obstante, dice la sabiduría popular que tras la tormenta llega la calma pero, superada la primera fase, ¿quién garantiza que el estado anímico-emocional de sus señorías (616 solo entre el Congreso y el Senado) no se vería impactado si en España se aplicara la racional razón y las cámaras (Congreso, parlamentos autonómicos) redujeran el número de integrantes hasta los exactamente necesarios? ¿Habría suficientes clínicas de reposo para tratar tal plaga, cuyas nefastas influencias llegarían a eliminar viajes gratuitos a donde plazca, bonos para taxis, ayudas para alquileres en Madrid, pagas extras por pertenecer a comisiones (ironía: Turismo) e, incluso,  gratificaciones sobre el sueldo base por asistir a plenos?

SUELDOS DIPUTADOS

  Los estados democráticos se definen por la plural representación ideológica en sus parlamentos. ¿Pero afectaría a la esencia de la voluntad popular la disminución de señorías? Tal mataperrería (Canarias, Cuba Perú) ¿podría ser considerada como supuesto atentado a los derechos ciudadanos? Peor aun: ¿tendríamos remordimientos de conciencia si una alta cifra de ellas no pudiera renovar su presencia (la nómina garantiza 4500 euros a los diputados) tras las próximas elecciones? A fin de cuentas algunas señorías solo han sido eso en su actividad, señorías, culminación de una regular carrera política ganada a pulso de genuflexiones ideológicas, oscurantismos éticos o ausencias de denuncias ante el dedo que, como en Quevedo, silencio avisa o amenaza miedo. 

   La noticia sobre el referéndum italiano -pasó de largo en algunos organismos- sorprendió por la casi unanimidad: el setenta por ciento de los italianos votó a favor de la reducción de senadores, propuesta presentada por el Movimiento 5 Estrellas, acaso sospechoso y equívoco en Hispania toda como tal Movimiento pero con mayoritario respaldo popular (rechazó 42 millones de euros correspondientes a los votos obtenidos en las elecciones de 2013).   

   Si trasladáramos tal propuesta a esta España que se debate entre la elemental supervivencia y la hecatombe, España bloqueada y maltratada por torpes visiones de quienes ocupan cargos políticos y vociferan ridículamente investidos por chulerías y prepotencias, ¿qué respuesta tendríamos? ¿Influirían en los votantes españoles las torpezas, contradicciones, osadas intromisiones en el campo rigurosamente científico de excelentísimos e ilustrísimos, incapaces de enfrentarse a sus grandes limitaciones racionales e incapacidades de gestión? 

EMILIO BOUZA  ¿Un ejemplo? El doctor Emilio Bouza, microbiólogo experto en enfermedades infecciosas, dimitió como portavoz del Grupo covid-19 madrileño. Duró en el cargo cuarenta y ocho horas. Directo enfrentamiento entre los gobiernos central y autonómico. La mezquindad política por encima de los intereses ciudadanos. (¿No dan ganas de mandarlos al carajo?)   

CASADO POR PADYLLA   Cuando el 24 de septiembre España llegó a la simbólica cantidad  de setecientos mil contagiados, ¿qué pensaron -si acaso tuvieron conciencia ética- portavoces y señorías de los partidos políticos, jocosas y coñonas, torpemente inquisidoras algunas, de la sesión del Congreso celebrada exactamente el día anterior?  (Recuerdo el nobelísimo pensamiento del señor Casado: “La reclusión evita el contagio... igual que se evitan accidentes de tráfico". ¡Cuánta sabiduría despilfarrada!) 

  ¿Tomaron acaso conciencia del caos a que llevan al país entre todos, unos como gobernantes, otros como oposición, los terceros como aliados o simpatizantes en nombre de posicionamientos de izquierdas (¿izquierdas?, ¿dónde?), derechas derechas y extremas, centros, nacionalismos? ¡Qué profundo abismo entre ellos, todos, y la realidad de la calle! 

  Con cincuenta y cuatro millones de euros que España derrocha en el Senado, ¿cuántos sanitarios españoles agotados casi hasta la extenuación serían sustituidos por colegas para gozar en Canarias de un merecidísimo descanso durante varios días y, después, continuar la ciclópea tarea de encierros, exposiciones al coronavirus… a causa de torpezas, aturdimientos mentales y mezquindades de algunos dirigentes? ¿Sobraría para trajes protectores especiales, pruebas diagnósticas, material sanitario… que cubrieran las necesidades de hospitales y centros de atención primaria? 

   A la realidad me remito: “Los brotes del Insular: Nos sentimos abandonados”. Es el relato de una trabajadora del HI publicado ayer (Canarias7).

hospital insular

* La casa de mi tía agradece la gentileza de Nicolás Guerra Aguiar 

nicolás guerra reseña

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MANCHETA 21