#FREEPALESTINE - por Alejandro Gómez Vázquez *

Me gustaría comenzar este artículo manifestando que yo no suscito ningún odio hacia los israelíes ni la población judía. Este artículo va dirigido únicamente a los genocidas y asesinos que además son apoyados por los Estados Unidos en su cruzada contra el mundo árabe (el que aún tiene petróleo), que han convertido Gaza, Jordania y Cisjordania en un infierno para los palestinos que viven ahí.

El pueblo israelí ha decidido en las elecciones que tuvieron lugar hace apenas dos días. Entre esas decisiones está la de mantener a un partido sionista de derechas en el gobierno y cuya baza electoral ha sido prometer el no hacer concesiones al pueblo palestino. Esto nos demuestra que para que un partido remonte en los sondeos solo tiene que apoyarse en la represión hacia un país con una cultura y religión distinta. Este es todo el progreso que se ha dado en las relaciones entre dos países a lo largo de casi 30 años, desde la primera intifada. Mientras que dos gobiernos luchan por el territorio, los que de verdad están sufriendo esta guerra son familias palestinas con niños y militares israelíes (y americanos) lo cual nos dice mucho sobre el equilibrio de fuerzas. También queda visto con el balance de muertos de la primera intifada: 1.162 palestinos defendiéndose con piedras y 160 israelíes respondiendo las piedras con disparos.

De los partidos mayoritarios que han salido, el único que apoya el diálogo con Palestina y abandonar la lucha es la tercera fuerza: La lista conjunta árabe-judía que busca un pacto para evitar que siga Netanyahu como presidente y continuando los asesinatos de Ariel Sharon (Guerra de Yom Kipur, del Líbano, de los seis días). Sin embargo parece que Netanyahu va a pactar con partidos más derechistas e intransigentes para poder gobernar.

¿Pero quiénes son en realidad los afectados de la guerra? A lo largo de las intifadas han muerto tanto israelíes como palestinos, pero los segundos en una proporción bastante mayor que los primeros. 11 años de guerra con miles de muertos mientras la mayoría de las naciones callan y asienten a los actos de Estados Unidos en Oriente Medio y sus asesinatos a civiles.

Y aquí siguen, negando la muerte de los niños palestino. 

¿Quién les da derecho a estos gobiernos a privar a los niños de tener infancia? ¿Acaso a alguno de nosotros nos gustaría tener con 5 años los mismos miedos que un adulto en una guerra? Por eso estas son las exigencias del pueblo oprimido: El reconocimiento como estado, el fin del conflicto armado y que se terminen los asesinatos en Gaza y Cisjordania.

No a la muerte de inocentes, sí al fin de la guerra y ¡Viva Palestina libre!

Alejandro Gómez Vázquez

* Publicado con autorización del autor