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viernes, 26 de abril de 2024 23:10h.

Vosotros/ustedes - por Teodoro Santana

“Todas las lenguas humanas –afirmaba el prestigioso antropólogo Marvin Harris– son mutuamente traducibles, y no hay prueba de que algunas dispongan de gramáticas más eficientes que otras. Las categorías y vocabularios difieren ampliamente, pero estas diferencias no indican un defecto intrínseco en la lengua, ni tampoco una inferioridad intelectual por parte de los hablantes. (...) El punto de vista de que algunos dialectos de lenguas estándar son formas de habla “inferiores” refleja prejuicios étnicos y de clase”.

Vosotros/ustedes - por Teodoro Santana

 

“Todas las lenguas humanas –afirmaba el prestigioso antropólogo Marvin Harris– son mutuamente traducibles, y no hay prueba de que algunas dispongan de gramáticas más eficientes que otras. Las categorías y vocabularios difieren ampliamente, pero estas diferencias no indican un defecto intrínseco en la lengua, ni tampoco una inferioridad intelectual por parte de los hablantes. (...) El punto de vista de que algunos dialectos de lenguas estándar son formas de habla “inferiores” refleja prejuicios étnicos y de clase”.

Precisamente, esto parece escrito para describir la relación de una parte del stablishment y de la intelectualidad de las islas con respecto al habla canaria, una auténtica despersonalización lingüística en la que se va sustituyendo nuestra forma de la segunda persona del plural (“ustedes”) por el localismo peninsular “vosotros”, especialmente a través del sistema educativo y, sobre todo, desde la universidad.

 En primer lugar, hay muchos profesores peninsulares que no adoptan nuestro habla. Y que transmiten a nuestros estudiantes sus pautas lingüísticas, despreciando las nuestras. En segundo lugar, un porcentaje importante de nuevos profesores canarios, bajo la influencia de los anteriores, reproducen el uso del “vosotros” y sus formas verbales correspondientes entre los universitarios del Archipiélago, especialmente cuando se dirigen a toda la clase o quieren ponerse “dignos”. Inconscientemente, asumen que la forma “ustedes” es inferior, causando un daño irreparable a nuestras jóvenes generaciones.

 

Si a ello unimos el impacto cultural de televisión, cine, radio y hasta traducciones literarias con las formas peninsulares de habla, podemos entender la gravedad del tema.

 

Las universidades canarias y, en general, todo el sistema educativo de las Islas, se está convirtiendo en la principal herramienta de despersonalización cultural de los canarios. Cada vez hay más jóvenes que usan el “vosotros” como forma “apropiada” del habla, interiorizando la sumisión y el coloniaje, el desprecio a lo propio, los prejuicios culturales, sociales y étnicos que se nos imponen.

 

No hay el más mínimo respeto con nuestros derechos culturales como canarios. Con la anuencia de las autoridades educativas, corremos el grave riesgo de que los jóvenes canarios terminen definitivamente por usar el “vosotros” y desaparezca de nuestro habla la forma culta de la segunda persona del plural, convirtiéndose en alienígenas lingüísticos con respecto a sus propios padres.

 

Entre nuestros derechos humanos –y entre los de nuestros hijos– está el respeto a nuestra identidad lingüística y cultural. Y la autoestima. Aunque claro, igual no somos más que gente incapaz de hacer nada bien, y todo lo bueno tenemos que importarlo de “Europa”.

 

Lo explicaba Frantz Fanon: “Todo pueblo colonizado –es decir, todo pueblo en cuyo seno haya nacido un complejo de inferioridad a consecuencia del enterramiento de la originalidad cultural local– se sitúa siempre, se encara, en relación con la lengua de la nación civilizadora, es decir, de la cultura metropolitana”.

 

La asimilación continúa a machamartillo. Desposeídos de nuestra propia lengua, ahora nosotros mismos nos desposeemos hasta de nuestra particular forma de hablar la lengua de los colonizadores, que para eso son mejores y más “cultos”.

 

Lo tenemos grabado a fuego –y sangre–: no somos más que una panda de maúros. Es que los canarios sois la hostia.