Me casé con un comunista (Jesús Cuadrado)
Philip Roth
La estrategia diseñada por los lumbreras demoscópicos de la derecha española es obvia: inutilizar, mandar al limbo, millones de votos de la izquierda. No es nuevo. El viejo sistema electoral diseñado en las Cortes franquistas y trasladado directamente a la Constitución con las maniobras de Martín Villa, como evidencia Javier Pérez Royo en La reforma constitucional inviable, estaba pensado para que la derecha consiguiera más escaños con menos votos, como ocurrió con las primeras citas electorales. La descomposición de la UCD rompió el juguete. Pero la doctrina pervive: divide a la izquierda, si quieres sacar más con menos. En eso están.
Y frente a esto, ¿qué hace el trío, Sánchez, Hernando y Oscar López, que dirige hoy el PSOE? O no entienden qué está pasando o su futuro depende de no entenderlo. En el Partido Socialista, por su propia supervivencia, deberían comprender que Venezuela y el comunismo es lo que menos preocupa a la derecha española, que “si otros no lo saben, ellos sí”. Reciclan narrativas anticomunistas de hace décadas para crear una situación psicológica pública que les proporcione una victoria electoral. Quieren mandar al cubo de la basura a, al menos, seis millones de votos de la izquierda. Si les dejan.
El artículo completo, en CUARTO PODER
http://www.cuartopoder.es/tribuna/2016/05/21/me-case-comunista/8601