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viernes, 19 de abril de 2024 10:24h.

Juan Negrín se sentiría muy orgulloso

La vida política y social en España, sobre todo y a raíz de la grave crisis económica que padecemos, se ha complicado y deteriorado, hasta límites insospechados. El distanciamiento y enfrentamiento de los partidos políticos y personal entre muchos de sus dirigentes, se ha acrecentado haciendo tensas sus relaciones.

Juan Negrín se sentiría muy orgulloso

Antonio Aguado Suárez,  Secretario de la Fundación Juan Negrín 

La vida política y social en España, sobre todo y a raíz de la grave crisis económica que padecemos, se ha complicado y deteriorado, hasta límites insospechados. El distanciamiento y enfrentamiento de los partidos políticos y personal entre muchos de sus dirigentes, se ha acrecentado haciendo tensas sus relaciones.

Por eso ha tenido más merito, el acto celebrado el pasado viernes 13, en la nueva sede de la Fundación Juan Negrín de Vegueta, donde estuvo presente una representación de la Sociedad Canaria: políticos de todos los signos, sindicalistas, empresarios, artistas y personas del mundo de la cultura en general.

Lo constructivo del acto, quedó de manifiesto en los discursos institucionales, de los presidentes del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Gran Canaria. Paulino Rivero en su alocución, expuso que a Juan Negrín se le estaba haciendo justicia y como canario ilustre, se merecía el reconocimiento de la sociedad.

El discurso de Bravo de Laguna, fue de gran altura y de mucho calado, por su contenido constructivo, aprovechando la figura de Juan Negrín como persona tolerante y conciliadora,  reivindicó el dialogo, como formula para lograr entendimientos y acuerdos.

Fue justo y generoso, cuando recordó a su antecesor, José Miguel Pérez, como el artífice del convenio suscrito por el Cabildo, con Carmen Negrín y la Fundación Juan Negrín, para que el archivo viniera a Gran Canaria, como así mismo, la cesión a la Fundación del edificio para su nueva sede. 

Para que el mencionado acto del pasado viernes fuera una realidad, se tuvo que producir que Bravo de Laguna sustituyera dignamente al anterior presidente, José Miguel Pérez y que su equipo: Larry Álvarez Cardero, como coordinador de cultura y Fernando Pérez González, director general de cultura, tomaran el relevo eficazmente para ultimar la gestión que aún quedaba por hacer, tal y como se había iniciado y en gran medida realizado por la anterior consejera de cultura Luz Caballero Rodríguez y su asesor Francisco Ramos Camejo, persona infatigable de gran capacidad y valía.

En la continuidad de la gestión de la actual corporación, ha jugado un papel clave la independencia demostrada por la Fundación, con relación a las opciones políticas u otro tipo de organización. Aunque la mayoría de los miembros del patronato coincidimos en una afiliación política, pero la misma, siempre ha estado al margen de todas nuestras gestiones y actuaciones. El ser una Fundación abierta a la sociedad, nos ha granjeado respeto y confianza.  

Juan Negrín, fue el autentico protagonista y los asistentes estuvieron a la altura de las circunstancias y del momento histórico y trascendental que se estaba viviendo, con la cesión generosa de la documentación al Cabildo de Gran Canaria, por parte de su nieta y propietaria, Carmen Negrín. 

Las instituciones canarias, gobierno y parlamento y el Cabildo de Gran Canaria, deberían considerar su generosidad a través de los reconocimientos y premios que tienen institucionalizados y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, podría nombrarla hija adoptiva de la ciudad.

Agradecemos las colaboraciones de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, con su Fundación Puertos de Las Palmas, a “la Caixa” y la naviera MSC, mediante sus profesionales: Iñigo Gracia,  Luisa del Rosario Monzón Guadalupe y Montse Alonso, respectivamente. Sus esfuerzos y dedicación, fueron sumamente importantes, para el transporte de la documentación. Como secretario de la Fundación, tuve el placer de conocerles y trabajar conjuntamente con ellos.

Desde bastante antes, se iba reformando y acondicionando el edificio cedido por el Cabildo de Gran Canaria, para que siendo sede de la Fundación, pudiera acoger a la documentación con todas las garantías de custodia y eficacia en su futuro uso. Al respecto, jugaron un gran papel con su desinteresada y altruista colaboración los profesionales, Claudio Medina y Valeriano Mora.

La puesta a punto y ornamentación del edificio, se logró, gracias al Jardín Canario con su director Bernardo Navarro y la profesional Alicia Roca. El CAAM a través de su técnico Luís Cuenca, proporcionó las esculturas: “cabeza de campesina” de Placido Fleitas, “busto de Alonso Quesada” de Eduardo Gregorio y “Ángel” del mismo escultor y la Escuela Lujan Pérez,  donó el cuadro de Juan Negrín, obra de la pintora Birgitta Edenborg, presente en el acto, junto al director Orlando Hernández.

Como en declaraciones públicas manifestó José Miguel Pérez, ha sido una lastima, que los medios informativos de proyección nacional, (salvo El País, mediante la periodista M. Tereixa Constenla Fontenla, expresamente desplazada a la isla, donde en la Fundación Juan Negrín su asesor histórico Sergio Millares, la atendió para que hiciera un reportaje especial) y sobre todo los públicos (aunque lo intenté con RTVE), no se hicieran eco del acto y de la extraordinaria importancia, que tiene no solo para Canarias y si para toda España, poder disponer de ésta amplia y muy importante documentación, que posibilitará estudiar más en profundidad la vida y obra de Juan Negrín, e igualmente, conocer con mayor rigor la reciente Historia de España.

De todas formas y lo más importante, es que la Sociedad Canaria representada en el acto, dio una prueba extraordinaria de responsabilidad, tolerancia y convivencia, de la que Juan Negrín, se sentiría muy orgulloso.

Antonio Aguado Suárez.

Secretario de la Fundación Juan Negrín