La ley electoral, ideada para derrotar a la izquierda en 1977, sigue hoy repartiendo los escaños injustamente (Carlos Enrique Bayo en PÙBLICO) Comenta Antonio Aguado
Carlos Enrique Bayo ofrece en PÚBLICO un valioso análisis de la manera tortuosa en que este remedo de democracia despoja de justicia democrática el sistema electoral. Algo que es repugnante en el estado de derecha español, pero que llega al extremo más denigrante en la colonia de las Islas Canarias, donde la oligarquía impone una legislación electoral absolutamente distorsionadora de la voluntad popular. Antonio Aguado, que señala y comenta el texto de Bayo, tiene tiempo dedicado a la brega de proponer un esquema electoral muchísimo más lógico y representativo, el de los distritos más reducidos, más cercanos a la gente.
Escribe Antonio Aguado:
Se entiende que los partidos políticos de izquierda, deberían apostar por ésta formula ya que al menos en teoría sus candidatos son más sensibles, y están pegados a la realidad social y en consecuencia, a los ciudadanos, para ser reconocidos y elegidos por estos de forma más cercana, abierta y eficiente a través de sus correspondientes distritos. Un total de 350 (uno por cada diputado) y no como en la actualidad se reparten los escaños por las 52 circunscripciones provinciales.
Para que no haya impedimentos de los nacionalistas y pueda gobernarse normalmente el país, debe contemplarse que el ámbito de los partidos políticos debe ser el mismo del territorio que se va a gobernar, bien sea el estatal, de nacionalidad o región.
En consecuencia con lo expuesto, no entiendo como Podemos le “hace el juego" a Ciudadanos, que de forma burda se ha reactivado y potenciado utilizando un lenguaje reaccionario en contra de los nacionalistas y adjudicándose ser los máximos defensores de la (su) injusta patria (España), que venimos padeciendo y soportando.
Las presidencias de los gobiernos estatal o autonómicos, tendría que hacerse por sufragio universal, con voto personal y secreto de los electores y producirse la segunda vuelta en caso de no obtenerse la mayoría necesaria (absoluta) por ninguna o ninguno de las/os candidatas/os.
Salud(os). Antonio Aguado Suárez