Pedro Quevedo, portavoz de Nueva Canarias (NC) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, exige el alcalde, Juan José Cardona, que explique “con claridad” a los ciudadanos cuáles fueron las razones que motivaron sus decisiones respecto a la operación del Canódromo, durante su etapa como concejal de Urbanismo.

 El concejal de Nueva Canarias señala a Cardona, y a su partido (PP), como uno de los responsables del caso y en consecuencia, “tiene que exponer por qué tomó decisiones que han perjudicado a los vecinos de Ciudad Alta y al municipio”.

 El PSC también es responsable de actual situación, en opinión de Quevedo, que asegura que los socialistas tuvieron la oportunidad de corregir “este disparate” pero prefirieron eludir su responsabilidad”.

 Perjuicio para los ciudadanos

La consecuencia de las erróneas decisiones tomadas por el actual alcalde, y no corregidas por actuales concejales socialistas, es una situación “vergonzosa” en la que una empresa privada ha obtenido pingües beneficios por una valoración municipal que desconocemos por qué no estaba ajustada al valor real de los terrenos, el parque más caro de la historia de la ciudad y el perjuicio de los vecinos de este barrio de la ciudad y de la ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria.

 Pedro Quevedo también insta a Realia, la empresa constructora de las torres del Canódromo, a que explique si en el proceso de construcción se produjeron alteraciones estructurales que condujesen al derruimiento del puente de Obispo Romo, con las consecuencias para los vecinos y los comercios de la zona que todos conocemos.

 “Nueva Canarias seguirá profundizando en esta cuestión”, anunció Quevedo que considera que el daño hecho con este asunto a los ciudadanos y a Las Palmas de Gran Canaria es irreparable.