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martes, 30 de abril de 2024 10:53h.

Brasil, golpe de estado judicial - Tres de textos de Emir Sader en PÁGINA 12, Juan Manuel Karg y editorial en LA JORNADA, seleccionados por Francisco Morote

 

frase lula

Francisco Morote, de Attac Canarias ha recopilado, de la multitud de testimonios de exasperación ante la persecución, acoso y derribo de Lula, estos tres textos: Lula, sin crimen, ni pruebas y sin habeas corpus (Emir Sader, en PÁGINA 12) Un supremo disparate (Juan Manuel Karg en LA JORNADA) y Brasil: la resistencia popular (Editorial de LA JORNADA). Y yo, Chema Tante, me uno a la inconsolable indignación ante una prueba más de cómo el neoliberalismo arrolla en todas partes toda iniciativa de libertad de la gente. Lo de Lula es intolerable, pero más repugnante todavía es la apatía con que muchos partidos de izquierda de las llamadas democracia asiste a la agresión sufrida por los movimientos populares, de los que lo de Lula es un claro exponente.

 

Si Lula fuese preso se entraría en un período todavía más turbulento de la vida política brasileña. De ahí a que, a lo mejor, no se atrevan, pero mantengan lo que más le importa a la derecha brasileña: tratar de impedir que Lula sea candidato a la presidencia del país.

https://www.pagina12.com.ar/106041-sin-crimen-ni-pruebas-ni-habeas-corpus

 

Repasemos. Un presidente sin votos, pero con botas. Reformas ortodoxas contra los trabajadores y jubilados que hacen retroceder décadas en derechos. Una concejal asesinada por denunciar la militarización de Río de Janeiro. Tiroteos a la caravana del ex presidente mejor valorado de la historia del país. Y una condena sin pruebas a quien encabeza todas las encuestas (y a quien no habían podido quebrar antes mental y sicológicamente, aun habiendo perdido a su compañera de toda la vida). Es momento de decir las cosas como son: lo que está pasando en Brasil es un supremo disparate.

http://www.jornada.unam.mx/2018/04/07/opinion/016a2pol

Si la persecución contra el ex presidente ya se encontraba irremediablemente desacreditada en lo jurídico por la escandalosa ausencia de pruebas en las acusaciones –a Lula se le condenó con base en la convicción de los magistrados acerca de su culpabilidad–, los recientes actos y declaraciones del citado juez Moro fueron la enésima demostración de la ilegalidad que salpica al proceso. Lo anterior porque, al negarse a recibir los recursos de apelación presentados por la defensa de Lula, el togado no sólo evidenció una vez más la naturaleza política de los cargos, sino que violó de manera abierta la garantía constitucional de agotamiento de la jurisdicción.

http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2018/04/07/editorial-brasil-la-resistencia-popular-5928.html

emir sader reseña

juan manuel karg reseña