Tsipras dobla el salario mínimo y da luz gratis a 300.000 hogares en pobreza energética, pero sin mujeres en el gobierno
Yo, Chema Tante, comprendo perfectamente, y me adhiero a la protesta de las mujeres y de los hombres que nos preguntamos si no hay en Grecia unas cuantas mujeres capaces de gobernar. Y que lamentamos que SYRIZA renuncie a ese recurso humano que por todo el mundo demuestra tener al menos tanta preparación como la masculina y, desde luego, mucho más de la sensibilidad social que tanto necesita un gobierno de izquierda.
Pero no puedo sino deplorar que el cainismo de alguna izquierda caiga de nuevo en los rigores ideológicos y exija a una partido como SYRIZA que renuncie al poder, antes de pactar con una partido de derecha, sí, pero que coincide en la premisa esencial en este momento: hay que plantarle cara a los capitalistas por el tema de la Deuda.
Y espero que la sensatez se imponga y que ni el error criticable ni la alianza comprensible impidan ver cómo va superando SYRIZA los tremendos problemas que se ha impuesto solventar.