La información que traía EL PAÍS este lunes 24 se tropieza con una declaración rajoyniana, asunto del follón catalán. Dice Rajoy que el problema es que no hay ingresos. Claro. Y no los habrá, mientras se empeñen en buscarlos en los bolsillos vacíos de los pobres, mientas los ricos se parten de la risa.