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Pepa Montero en 65 Y MÁS trata sobre algo que yo, Chema Tante, digo que es obvio, pero que parece que no lo fuera, para gobernantes y para economistas neoliberales. Las pensiones tienen unos niveles de miseria y el alza de los precios, destrozan a la gente. Mantener, como hacen los economistas neoliberales que las pensiones solamente deberían ajustarse a la llamada "la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) " es sostener que las y los pensionistas no se alumbran y solamente comen alimentos crudos, sin cocinar. La realidad, otra vez es la misma de siempre. Las pensiones deben ser revalorizadas, con garo a los presupuestos. Si hay pasta para subir los gastos de defensa, más debe haber para que la gente mayor no se muera de hambre.
Javier Darriba, con foto Juan Carlos Alonso, denuncian en CANARIAS 7 este nuevo caso de la brutalidad burocrática, esta vez, contra una pobre señora. Lo señala y comenta el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado. Y yo, Chema Tante, tengo que decir que, parte de mi solidaridad con esta pobre mujer, lo que más me preocupa es la certeza de que no es una situación aislada. Me aterra pensar en cuánta gente, por muchos ayuntamiento, cabildo y oficinas gubernamentales están sufriendo similares crueldades. Las instituciones públicas deben arreglar también este problema, tan frecuente, de la insensibilidad oficial.
Las grandes empresas y los capitalistas siempre han exigido controlar toda la economía y los resortes económicos en base al liberalismo totalizador, pero no se privan de vivir a costa de los contratos de los estados, utilizar sus infraestructuras y servirse de sus ejércitos y policías, que consideran suyos –todo es suyo- excepto atender a las personas y respetar sus derechos.
Informamos de un caso que nos llega y adjuntamos un audio desgarrador: