Nota de Chema Tante: Recomiendo este reportaje. con el que creo que hay que recordar que la lucha popular se apoya por igual en la acción ciudadana y la brega sindical. En USA se están empezando a enterar, en Europa y en Canarias tendremos que empezaar a recordarlo. En la calle, y en el trabajo. Ese es el campo de batalla de la izquierda.

NO INCINERACIÓN TENERIFE ofrece este estudio comparativo de tarifas entre el tranvía Santa Cruz - La Laguna y la guagua. Con el olvido popular es siempre grande, haya que recordar el l tamaño de esta estafa, otra estrella más en la constelación de granujadas de la historia política y económica de las islas. Desde su inicio, toda mente pensante isleña comprendió que ese proyecto del tranvía era inconveniente. No supone ningún beneficio medioambiental, porque la energía que consume se sigue generando quemando fósiles, destroza el territorio, ha generado un caos circulatorio en la ciudad, obligando al tráfico a dar rodeos y vueltas, con más consumo de combustible y no se justifica, existiendo un servicio de guaguas que podía ser tan eficiente como pudiera ser el transporte guiado. Pero Melchior y la banda sinvergüenza que gobierna Canarias se empeñaron en plantificar ese ranvía, por motivos que quien se detenga a reflexionar entenderá con tanta facilidad como yo. Se trata de 20%, de terrenos a revalorar, a favores que mercachiflar, en beneficios particulares. Y, desde entonces, nos han venido restregando por los besos el supuesto éxito del tramposo tranvía. Ocultando que tal éxito se debe a que le han liberado de la competencia de la guagua. Lo cierto es que quien toma el tranvía es quien antes tomaba la guagua, que quien iba en coche, sigue yendo en coche. Y que el tranvía acumula una deuda ingente. Pero las cuentas de la gente que gobierna están bien gordas, eso sí.  

Hace décadas que el movimiento ecologista alerta sobre las consecuencias de las agresiones al medio ambiente. Sin embargo, los gobiernos de turno han pivotado entre la permisividad, la inacción y la propia autoría de tales agresiones.

El grupo de gobierno omite a la ciudadanía cifras y detalles de esta adjudicación que revelan el verdadero coste para el municipio