Recomendado por Federico Aguilera Klink, que comenta: Borrell es el perfecto ejemplo de político incompetente y pretencioso, que se cree que forma parte de las élites intelectuales, y resulta que lleva décadas demostrando su mediocridad... quizás por eso ha llegado tan "alto"... obedeciendo, tapando Abengoa...y otras cosas, y al que parece que le está a punto de llegar su San Martín político y una pensión de cine, como la que tiene Durao Barroso. Es muy clarificador comparar estas actitudes y declaraciones de Borrell, con las de Lavrov, su colega ruso
Virginia Pérez Alonso, directora de PÚBLICO, denuncia las malas mañas de ciertos -muchos- medi0os de comunicación que disfrazan textos publicitarios y pide, con mucha justicia, ayuda para su medio. Lo destaca Federico Aguilera Klink y yo, ChemaTante, lo comento, ampliando la petición hacias los medios que ni siquiera tenemos ingresos publicitarios de ninguna especie
Andrei Martyanov en REMINISCENCIA DEL FUTURO trata otra vez de la cínica manera en que se comenta la guerra de Ucrania, mintiendo y tergiversando. Lo destaca Federico Aguilera Klink. Y yo, Chema Tante, digo que estamos ante la desgracia -porque lo sufrimos- de unos gobiernos, los llamados occidentales, dirigidos por gente felona y simplona. Se creen sus propias mentiras, piensan que Rusia está perdiendo la guerra, cuando la realidad es que Rusia está aplicando la prudencia y moderación. No se trata solamente de la cuestión nuclear. Se trata de algo no tan grave, pero que no por ello de ser letal, la cuiestión económica. No se enetran, pero Rusia podría desatar una caos económico en Europa, que se llevaría por delante a todos los actuales gobiernos y generaría el caos más absoluto. Y no lo hace. Von der Leyen, el obtuso Borrell, Sánchez, Johnson, Scholtz, Draghi, Macron, deberían estar dando las gracias a Putin por su clemencia o su sentido común.
La situación política actual hace que Canarias esté sufriendo un doble castigo. El procedente de un Gobierno estatal conservador y que ha maltratado a nuestra comunidad desde finales de 2011. Y el más cercano, de un Ejecutivo canario crispado, dividido, errático, esperpéntico; en el que predominan las tendencias insularistas y conservadoras, así como el impulso a un modelo desarrollista que desprotege al territorio y al medio ambiente y que pasa, además, buena parte de su tiempo dilucidando conflictos entre sus socios.