Joaquim Bosch en EL DIARIO, en artículo que recomienda el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado trata sobre el descomunal problema montado en el Pode Judicial, desde el punto de vista técnico. Pero, en la opinión de un tipo de la calle, que soy yo, Chema Tante, esto es una auténtico desastre de la democracia. Claro que para una multitud de tipas y tipos de la calle también, no pasa nada, pero es una catástrofe. Una catástrofe, encima, perpetuada. Solamente la gente ciega en política -que tanto abunda en este estado de derecha- ignora que el bloqueo de las alturas de la Justicia lo mantienen los y las delincuentes organizados en el partido mal llamado popular para garantizarse, dentro de lo posible, la mayor impunidad y complacencia para sus delitos. No hay otra historia. Y, como eso lo han podido hacer porque se lo permite la Constitución, es lícito afirmar que la Constitución del 78 fue y es una chapuza.