Mucho cuidado con esto que dice JUan Torres, en artículo en PÚBLICO y charla en YOUTUBE que señala Francisco Morote, de Attac Canarias. Mucho cuidado, porque se trata de un problema que va a potenciar sin duda los efectos tremendos de la pandemia. Yo, Chema Tante, le digo a Torres que tiene mucha razón, pero no le prestarán atención ninguna. Porque el fallo de Garamendi, es el mismo de la mayoriía lerda de empresarios y, al menos en el caso de Canarias, de quienes conducen la política. No asumen que los tiempos han cambiado. Pretenden que todo esto que pasa es una horrible pesadilla y que, cuando despierten, seguirá ahí el mundo que habían construído para su total beneficio a costa del prójimo o prójima y a costa de la habitabilidad del Planeta. Y seguirán con sus malas mañas, destrozando el territorio y el medio ambiente, crujiendo a la gente, hasta que la Pachamama vuelva a expresar su exasperación, con otra catástrofe. De pesadilla en pesadilla, nos llevan al riscamiento definitivo.
Tengo que recurrir a la socorrida metáfora de lo del zotal. Las ingentes cantidades de desinfectante que habrá que aplicar al Parlamento de Canarias el día que se recupere la democracia. Porque la multitud de situaciones infectas que se han sucedido a lo largo de estos años en esa Cámara es inconcebible. Como lo ocurrido este miércoles 9 de abril, que refleja con claridad Padylla en LA OPINIÓN que podrán ver completa si pinchan en la imagen.
"Santa Cruz de Tenerife afronta una indemnización de 8 millones por paralizar Las Huertas", dice la información firmada por Eloísa Reverón en LA OPINIÓN. Se trata, ya saben, de unos terrenos en los que la empresa MAPFRE DESURCIC pretende construir, a pesar de que ese suelo le fue arrebatado a sus legítimos propietarios. Y yo digo que lo ocurrido en la playa chicharrera y espacios aledaños es una muestra clarita de la inoperatividad de una Justicia que toma decisiones incomprensibles, que no hace respetar otras y no termina de decidir sobre el asunto esencial de esta monumental estafa.