El estado de derecha español sigue sepultado en la más negra Edad Media. Unas condiciones feudales, en las que la gente de abajo es víctima de una serie interminable e impune de estafasLa fiscal, la hipotecaria, la comercial consumista... y entre ellas, la energética. Las multinacionales, con la entusiasta colaboración de los gobiernos se ensañan con las personas, metiéndoles un increíble fraude con el suministro de la energía, sea gasolina, sea gas, sea electricidad. Antonio Aguado señala en PÚBLICO este argumentado artículo en el que Juan Carlos Escudier describe los detalles del timo. Por cierto que, también en esto los bergantes del neoliberalismo, que se supone defienden las excelencias del mercado, lo que hacen es distorsionarlo, para lucrarse. Vean también como tratan el asunto Morgan, desde CANARIAS 7 y Manel F.

El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal lo ha dicho con claridad meridiana, en un español inteligible incluso para tarugos impenitentes, como Melchior, Becerra, Alonso, el genuflexo Clavijo o su comisario empresarial, Ortega:  "la electricidad producida con gas, la más cara"  

Mientras el genuflexo Clavijo se muestra privado por los éxitos de gestión, los suyos y los de su partido que lleva lustros gonernando. Mientras este velillo dedica sus esfuerzos a aprobar una Ley del Suelo que favorecerá la espceculación. Mientras el mayordomo de la oligarquía canaria mantiene el freno de hecho a la generación limpia de energía y se emperreta en inponer el tóxico, peligroso y caro gas, 120.000 familias, una cifra tremenda, no pueden pagar el recibo de la luz en Canarias. Un dato que aporta el propio  comisionado de Inclusión Social y Lucha contra la Pobreza, Néstor Hernández, según cuenta EL DÍA. Parece que este comisionado está para observar los acontecimientos, no para mejorarlos. Lo que no dice la noticia es que el genuflexo Clavijo haya dimitido todavía. Sería tener vergüenza, algo de lo que este miserable carece.

“La gran mayoría de los hogares españoles y por supuesto canarios, saben que el coste del servicio de luz no corresponde al servicio que se presta, y no solo por compararnos con otros países de la Unión Europea, con facturas de luz mucho más baratas, es solo aplicando el sentido común y comparándolo con otros servicios del hogar,  es un coste de lujo para un servicio básico y necesario”, comentó Angel Treviño, director de Ecoluz Consultores.

El gomero EL TAMBOR trae esta información y esta consideración. De cómo las renovables, la energía del siglo XXI, limpia, barata y no importada, siguen fuera del escenario en estas islas, excepcionalmente dotadas por la naturaleza y por el avance tecnológico, para alcanzar la soberanía energética.

Lucía Villa escirbe en PÚBLICO, que recomienda Antonio Aguadio y del que el primer mérito -no el único, ni mucho menos, es la habilidad para resumir el asunto en el titular.