Aunque Walter C. Medina, en este artículo en NUEVA TRIBUNA se refiere concretamente a la idiocracia argentia, es obvio que, dado su conocimiento de la realidad social en el estado español y en el plano internacional, su reflexión puede extenderse a muchos otros gobiernos. En Europa, en USA se observa el mismo fenómeno que permite gobernar a tipos como M. Rajoy o, en esta Canarias africana, al genuflexo Clavijo. Pero hay que decir, en beneficio de mucha de esa gente cuya idiocia les hace votar por semejantes especímenes, que sus decisiones estúpidas son inducidas mediante campañas de mentira pagadas con dinero de origen inconfesable y, encima, potenciadas con leyes electorales diseñadas para torcer la voluntad popular. Walter, apoyándose en el abuelo de Facundo Cabral y en el documental Idiocracy de Mike Judge, compone un argumento que confirma el origen de muchas de las desgracias que atribulan a la gente.