La casa de mi tía

Alonso y Melchior, el mismo collar
Ya me perdonarán ustedes el topicazo, pero es que pocas veces viene tan a cuento. "Que algo cambie, para que todo siga igual", decía el novelista italiano. Y eso es lo que suelen hacer en la coalición nada canaria. Melchior lo había dicho en su campaña, es cierto, pero eso no le resta vileza a esa maña de presentarse a unas elecciones y mandarse a mudar a mitad de mandato, dejando a un delfín, un tapado. A Carlos Alonso, un personaje que, tal como está el sistema electoral, no lo conoce nadie. De manera que el nuevo presidente del Cabildo no ha sido realmente elegido por nadie más que por su tutor político. Y, como es un individuo que ha estado en todas las operaciones de Melchior de los últimos tiempos, seguirá milimétricamente las politicas de su mentor. Así que, de cambio, nada; de renovación generacional, nada. Cambian la cara, las esencias permanecen igual.