En caso contrario, cree que no se debe pagar a la adjudicataria por los servicios que no preste mientras duren las obras de mejora del complejo
Hace unos meses me tropecé por casualidad con Belén Lorenzo y experimentamos la alegría del encuentro del misterio de la escritura. Me contó que había publicado su primer libro.
Tras las sucesivas denuncias ante Ayuntamiento de LPGC y Cabildo sobre todo tipo de actividades ilegales en parajes de alto valor ecológico de esta zona de Gran Canaria, el Colectivo Ecologista Atamarazayd ha denunciado la absoluta pasividad de los gestores municipales e insulares ante los frecuentes atentados ecológicos, destrucción de ecosistemas, caza y pajareo ilegal, vertidos y pistas clandestinas de trial.
Era el 9 de agosto de 1936, víspera de la fiesta de San Lorenzo, cuando los voladores se mezclan con el estallido remoto de las perseidas alumbrando el cielo nocturno, la gente desde mediodía salía caminando por el “Camino viejo” hacia el pueblo maldito, donde hasta hacía pocos meses había un gobierno municipal con mayoría absoluta del Frente Popular.
SB-Noticias.- La Asociación Canaria de Víctimas del Franquismo y la Plataforma de Familiares Fusilados de San Lorenzo, han alcanzado hoy miércoles 22 de julio con el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, un acuerdo sobre las entre 60-80 personas asesinadas y enterradas en la fosa común del cementerio de Las Palmas (Vegueta).
Piden al nuevo alcalde, Augusto Hidalgo, la ejecución de la resolución plenaria de agosto de 2013, donde se aprobó por unanimidad la realización de un estudio para el inicio de la exhumación de dicha fosa, en la que se encuentran los restos de más de 60 personas asesinadas por los franquistas, así como la instalación de una placa homenaje con sus nombres.
Pedro Quevedo afirma que esta propuesta supone un reconocimiento a la historia de una parte importante de la ciudad
Eran ya las dos de la tarde cuando se abrió bruscamente la puerta de la celda, donde cuatro de los cinco de San Lorenzo esperaban la hora del fusilamiento, dos soldados y un cura aparecieron en el umbral, afuera en aquel cuartel de La Isleta el siroco no dejaba ver el cielo de aquel lunes 29 de marzo de 1.937, solo polvo y un viento que estremecía el alma.