Desde el carácter escasamente sospechoso que le confiere su condición de no votante de PODEMOS. Juan García Luján escribe en su SOMOS NADIE este alegato en defensa, no exento por ello de crítica, de la actuación testimonial de una mujer diputada que llevó a sumamón al Congreso. Un episodio que ha levantado iras y críticas de la manada carca habitual. La misma que, sin embargo, asiste impetrérrita a la procesión de mamones y mamonas que pulula en el escenario político y económico de este estado de derecha.

Las recientes declaraciones del líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, donde afirmó esta semana en tono futbolero y sonriente, que la rivalidad PP-PSOE es como la del Real Madrid-Barça, que se meten caña en los partidos que se enfrentan, pero en cuanto se unen en la selección española, luchan juntos y patrióticos por ganar y conseguir lo mejor para España.