Fructuoso Rodríguez Morales, in memoriam - por Francisco Javier González
Atina Federico Aguilera Klink cuando dice que son temas que parecen quedarnos lejos, cuando recomienda esta necrológica que hace Gilbert Doctorow en CONSORTIUM NEWS, a la muerte de Stephen Cohen. Sin embargo, como también señala el inquieto profesor, la muerte de cohen trae a la luz un montón de asuntos. Se trata, por encima de todo, del aislamiento de algunas autoridades científicas cuando denuncian las artimañas belicistas del poder. Pero también, de la insidiosa tarea de otras supuestas autoridades y, muy en especial, de medios, analistas y comentaristas, azuzando al enfrentamiento violento entre países. Ahora, tenemos la cuestión al rojo vivo. Cohen fue un campeón de la verdad y eso debemos reconocerlo y beber de ello, quienes abogamos por la paz y el entendimiento. Parece una ilusión visionaria, pero es así.
Tercera entrega de la emotiva serie que Javier Cortines ha dedicado en CONTRAINFORMACIÓN a un personaje entrañable, San Mao, Tres Pelitos, Chen Ping. La historia de una mujer que incluye muchos aspectos. La afinidad entre etnias de origen muy lejanos (en Barlovento, La Palma, San Mao tiene un monumento dedicado) , un amor, con José María Quero, trágicamente truncado y, como fondo, la tragedia de la dominación extranjera sobre el pueblo saharaui. Muy interesante trabajo de Cortines que sería una lástima que se difuminara en la vorágine de publicaciones de estos tiempos.
Acabo de regresar a la Villa en Gomera y la noticia luctuosa que me espera al abrir el ordenador y reconectar con mi pequeño universo personal es la muerte en Titeroygakat (Titeroygaca escribiría D. Agustín Pallarés) del amigo y compañero Florían Corujo Tejera. Con Florian, como con sus hermanos Antonio y Domingo, compartía las ideas que, sin importar donde militáramos en cada momento, nos unían, como el amor a Canarias con el afán de ver a nuestra tierra libre e independiente; la querencia, heredera de generaciones de emigración interior y exterior, por la otra orilla llamárase Venezuela o Cuba; el aprecio admirativo por nuestro paisanaje, los magos de cualquier isla, fueran mahos, canarios, guanches benahoritas, bimbaches o gomeros y el apego a nuestras costumbres ancestrales.