Coronavirus. Economía y empleo. Ranking según PIB. Trio de importantes asuntos que pesca y analiza Domino Méndez en la Prensa Canaria del 12 de marzo

El coherente veterano militante socialista Antonio Aguado señala y  comenta la crónica de Teresa Artiles en CANARIAS 7 que informa de que la Fundación Ciencia y Desarrollo certifica la triste vida de la Universidad Canaria, muy especialmente en su centro de ULPGC. Y yo, Chema Tante, denuncio que, digan lo que digan los rectores, la Universidad Canaria ha desertado de su principal función, la generación de conocimiento desde la perspectiva insular canaria. Los dos centros, ULL y ULPGC no pasan de ser meros y cochambrosos institutos comerciales.

Una rigurosa metodología de evaluación. Se acaban de publicar los resultados del Ranking Mundial de Universidades correspondientes al 2018 y que evalúa el rendimiento de casi mil universidades a partir de seis parámetros: reputación académica (40%), calidad del empleo (10%), ratio facultad/estudiantes (20%), citaciones por facultad (20%), ratio internacional de facultades y ratio internacional de estudiantes (5% cada uno), rigurosa evaluación que, junto con la amplitud de la muestra de universidades incluidas en el estudio (959), correspondientes a 84 países, ha hecho del Quacquarelli Symons (QS) probablemente el más prestigioso sistema de evaluación universitaria a nivel mundial.

Antonio Aguado recomienda esta información de Ana Requena Aguilar en EL DIARIO, cuyo titular lo dice todo.

El Archipiélago canario continúa acumulando récords y estadísticas negativas.  Al acabar 2014 fue la región del Estado español con mayor concentración de ejecuciones hipotecarias sobre el total de los préstamos para la compra de vivienda firmados entre 2003 y 2013.

La reveladora clasificación que merece el tal Guindos, ha sido merecidamente resaltada por infinidad de medios, para su vergüenza y la del capo de su banda, Rajoy.

En CANARIAS-SEMANAL, Eugenio Fernández agrega este buen reportaje a la tonga de documentos que testimonian el brutal nivel de la desgracia nacional canaria. En este caso, lo que certifica Eugenio es que, además de arrastrar los peores registros de empleo de Europa, la gente que todavía sigue empleada lo esta cada vez en peores condiciones de precariedad.