Paulino, fino estilista de la alegantina y la tramoya, se enreda otra vez con el rollo de la reforma del Estatuto. Y José Miguel. estupendo corifeo, le secunda. Pero, estos dos vivos no lo dicen, la dichosa reforma no podrá ser. Porque no hay tiempo y porque Rajoy y la horda pepera no quieren. Bueno es Soria para eso.

 Lo comentó mi exalumno Javier Durán cuando salímos de la presentación de un ensayo en la Feria del Libro: desde 2010, los Gobiernos españoles han bloqueado de tal manera los archivos militares y diplomáticos que en estos momentos es imposible investigar en torno a documentos ¡de hace setenta y tantos años!, de cuando los submarinos alemanes de Hitler repostaban en puertos canarios, por ejemplo.