Juan Torres en PÜBLICO y Juan Carlos Monedero en PÚBLICO, en sendos artículos seleccionados por el coherente veterano militante socialista Antonio Aguado, comentan la bochornosa declaración del portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, rechazando la Renta Mínima Universal . Yo, Chena Tante, empezaré mi comentario diciendo que nadie quiere atacar las creencias religiosas de nadie ni, mucho menos, ofender a tantas personas que siempre viven con honestidad su fe cristiana ejerciendo con honestidad su fe y actando el mandato de amor de su fundador Jesucristo y, ahora, como siempre, en estos momentos dramáticos, están acudiendo a socorrer a la gente desamparada y enferma. El ataque y la condena se dirigen a la curia de una organización religiosa que, precisamente, ignoran y desprecian la doctrina del amor que es consustancial a su fe, que se alinean con la clase eMpresarial déspota, y no con la gente desamparada y doliente. El ataque se dirige a esos mitrados que defienden los privilegios que disfrutan, heredados de la generosidad franquista, pero se oponen a que gente que no tiene ningún ingreso reciba una cantidad mínima que le permita mantenerse.
Cuidados selección, juiciosos comentarios de Domingo Méndez sobre la Prensa Canaria del 14 de enero. Oramas, multada. Darias, toma de posesión. OPE en Educación. Tráfico aéreo y subvenciones. Renta por municipios. Educación Infantil. Servicios sociales. Vertederos. Caso Juan Luís Guerra.
Hormiga: “Esas ayudas deben ser transparentes y concederse de forma equitativa, incluyendo también al patrimonio que está en manos privadas”
La consejera Mila Hormiga apunta que desde 2014 hasta la actualidad, el Gobierno insular de CC-PSOE ha multiplicado por siete las subvenciones a dedo “y hay que hacer un trabajo detectivesco para encontrar las subvenciones que han sido otorgadas en esa modalidad”
La organización se financia desde sus comienzos exclusivamente con las cuotas sindicales, habiendo rechazado la posibilidad de beneficiarse de subvención alguna para mantener su “esencia e independencia”
Se hace necesario abrir el debate objetivo, transparente y participativo sobre qué medidas de fomento se implantan en Arafo, con qué fin y tratando que su concesión revierta siempre en el interés general