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miércoles, 15 de mayo de 2024 16:13h.

Contra los memorandos y los tratados europeos


Construyendo LA IZQUIERDA manifiesta su apoyo al encuentro nacional de organizaciones obreras y populares que se celebrará el próximo sábado 23 de junio en Lisboa. En dicho encuentro se reclamará la retirada del Memorándum de la Troika, así como la retirada de los nuevos tratados europeos. Solo así se conseguirá, según los compañeros portugueses, una Unión Europea que sea la verdadera expresión de una unión libre de naciones soberanas, sin explotación ni opresión.



CONTRA LOS MEMORANDOS Y LOS NUEVOS TRATADOS EUROPEOS

Construyendo LA IZQUIERDA manifiesta su apoyo al encuentro nacional de organizaciones obreras y populares que se celebrará el próximo sábado 23 de junio en Lisboa. En dicho encuentro se reclamará la retirada del Memorándum de la Troika, así como la retirada de los nuevos tratados europeos. Solo así se conseguirá, según los compañeros portugueses, una Unión Europea que sea la verdadera expresión de una unión libre de naciones soberanas, sin explotación ni opresión.

Hoy más que nunca es necesaria la movilización de los pueblos para garantizar el Estado del bienestar, que tantas décadas de lucha costó en Europa. La lucha por el Estado del bienestar no es más que la lucha por la vida y el futuro de naciones enteras que hoy, con la excusa de la crisis y sus recetas neoliberales, nos quieren arrebatar para hacer con ellas grandes negocios.

Construyendo LA IZQUIERDA se alinea con las voces que en el Partido Socialista portugués han expresado su rechazo al Memorándum de la Troika y a los nuevos tratados europeos. Entre esas voces, destacan la del expresidente de la República, Mario Soares, y la del expresidente del Grupo Parlamentario Socialista, Francisco Assis. Estas voces reflejan lo que gran parte de los electores y militantes socialistas portugueses están reclamando a su Partido, que no es otra cosa que dejar de apoyar al Gobierno conservador en el cumplimiento estricto de las condiciones impuestas por la troika al pueblo portugués.

Los compañeros portugueses que convocan este encuentro nacional reclaman, al igual que Construyendo LA IZQUIERDA, construir en cada país y en Europa un frente único entre militantes de distintas organizaciones para derrotar las políticas neoliberales impuestas por la troika (CE, BCE y FMI). La grave situación que atraviesan los países GIPSI (Grecia, Irlanda, Portugal, España e Italia) y el expolio al que se los quiere someter hacen más necesaria que nunca la unidad de acción política y sindical en estos países.

En este sentido, Construyendo LA IZQUIERDA apoya igualmente el encuentro europeo que se celebrará en Colonia (Alemania) el próximo 30 de junio, convocado por militantes, obreros y sindicalistas, para reclamar también la no ratificación de los fondos de salvamento a la banca y la no ratificación del pacto fiscal o Tratado de Gobernanza. En Alemania se están recabando firmas para que los diputados socialdemócratas del SPD no voten a favor de dichos fondos y tratados.

Es sintomática la voz que se está alzando en el movimiento obrero alemán, dispuesto ahora a encabezar la lucha de toda la clase trabajadora europea contra las políticas neoliberales que quieren imponer los fondos de rescate y los nuevos tratados comunitarios. Construyendo LA IZQUIERDA se une a este movimiento obrero alemán, que quiere despertar a todo el movimiento obrero europeo. En Colonia, el 30 de junio, se quiere poner en marcha la campaña europea en contra de los nuevos tratados y a dicha campaña se sumará Construyendo LA IZQUIERDA.

Por eso, Construyendo LA IZQUIERDA hace un llamamiento a los sindicatos mayoritarios españoles y a la Confederación Europea de Sindicatos para que, aprovechando el encuentro portugués del 23 de junio y el encuentro alemán del 30 de junio, se pongan a la cabeza de esta nueva lucha contra los fondos de rescate y los tratados comunitarios, que quieren doblegar a los países en apuros, sometiéndolos a una disciplina fiscal que anulará las posibilidades de crecimiento económico y recortará considerablemente sus Estados del bienestar.

La clase trabajadora europea no puede permanecer inactiva por más tiempo. Ha llegado el momento de plantar cara a las grandes corporaciones financieras y a sus Gobiernos amigos, planteando una lucha sostenida en el tiempo, pero una lucha unívoca y planificada que demuestre a esas corporaciones y a esos Gobiernos que los trabajadores europeos no se dejarán arrastrar por la codicia de unos pocos y la pasividad de otros tantos. Como a principios y mediados del siglo pasado, una vez más, los de abajo tienen que pelear por sus derechos y por su dignidad y hacerlo hoy como entonces se hizo, con una estrategia común y coordinada pues, de lo contrario, país a país, se consumará la estrategia que tantos beneficios le ha reportado siempre a la clase política y a la clase empresarial: "divide et vinces", "divide y vencerás".