Izquierda Unida acusa al gobierno municipal de mantener una política de contrataciones públicas sin justificaciones y sin cumplir el acuerdo del Pleno de crear una comisión de supervisión que garanticen la transparencia y la libre concurrencia.

El Pleno de este mes de mayo ha sido otro ejemplo de la errática política en materia de contratación. Aprobándose iniciar los trámites para contratar un “consultor deportivo” de junio a diciembre por 12 380,97 €.  Contratación que se realiza sin ningún proceso de participación, sin una memoria justificativa, confundiendo en el pliego lo que es un contrato administrativo de servicios con condiciones laborales que generan el riesgo de generar contratos laborales en fraude de ley, por las que el Ayuntamiento ya ha sido condenado en otros casos.

A iniciativa de una moción de Izquierda Unida el Pleno del Ayuntamiento de Arafo aprobó en el mes de octubre de 2015 la creación de una comisión informativa  en materia de contratación. También se aprobó  que se publique trimestralmente en la página web del ayuntamiento, como exige la Ley de Transparencia, “todos los contratos, con indicación del objeto, duración, el importe de licitación y de adjudicación, el procedimiento utilizado para su celebración, los instrumentos a través de los que, en su caso, se ha publicitado, el número de licitadores participantes en el procedimiento y la identidad del adjudicatario, así como las modificaciones del contrato”.

El objetivo de la creación de una Comisión Informativa es aportar transparencia sobre los contratos menores que realiza el Ayuntamiento. Se trata de aquellos contratos, de importe inferior a 50.000 euros en el caso de obras y 18.000 en otros contratos, que pueden adjudicarse directamente a cualquier empresario.

Constatamos como una característica de la contratación pública local es el uso continuo e indiscriminado de los contratos menores. Una situación a la que no es ajena el Ayuntamiento de Arafo, como demuestra la gran cantidad de ellos que figuran periódicamente en la relación de resoluciones de la Alcaldía.

Se ha paralizado que la comisión garantizara la aplicación efectiva de los principios de publicidad, libre concurrencia, objetividad, transparencia y eficacia en la contratación pública.

 Esto supone un flagrante incumplimiento de los acuerdos del máximo órgano municipal que debe guiar y vincular la actuación del Alcalde y su grupo de gobierno.

Su comportamiento recuerda épocas pasadas donde el Pleno era un molesto órgano de democrático, supone un menosprecio para el resto de los concejales y del trabajo realizado para motivar la referida moción.

Estos hechos reflejan el poco talante democrático y como aprueban mociones para salir bien en la foto y luego hacen todo lo contrario como en el presente caso. 

En Arafo a 12 de mayo de 2016.