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viernes, 17 de mayo de 2024 08:53h.

La Laguna: Santiago Pérez pide al Pleno una nueva ordenación para Valle de Guerra

El concejal del Grupo Municipal de Por Tenerife (Socialistas por Tenerife-Equo), Santiago Pérez, ha presentado una moción instando al Gobierno municipal a reformular el modelo de ordenación para Valle de Guerra previsto por el PGO aprobado inicialmente para sustituirlo por otro que respete la forma de relación tradicional de esa población con el territorio.

Santiago Pérez pide al Pleno una nueva ordenación para Valle de Guerra

El concejal del Grupo Municipal de Por Tenerife (Socialistas por Tenerife-Equo), Santiago Pérez, ha presentado una moción instando al Gobierno municipal a reformular el modelo de ordenación para Valle de Guerra previsto por el PGO aprobado inicialmente para sustituirlo por otro que respete la forma de relación tradicional de esa población con el territorio.

Pérez solicita que se dé respuesta a las previsiones objetivas de crecimiento poblacional, se corrijan los déficitis de infraestructuras, equipamientos y dotaciones, pero dimensionándolos a unos desarrollos sostenibles de su población y no a unos crecimientos desorbitados inducidos por el propio PGO, preservando las bolsas de suelo agrícola especialmente apto para la agricultura intensiva, estén o no actualmente en explotación.

El concejal recuerda que durante la realización del tan nombrado proceso de participación ciudadana en Valle de Guerra “no se consideró propio de las discusiones del Avance” el tema de la forma de relación de la población con el territorio, que es la gran cuestión que debe ser abordada como fundamento de la elaboración del planeamiento: “En el lenguaje de la gente, se trata de decidir si se va a respetar la forma tradicional de asentamiento poblacional, que define en gran medida el modo de vida y el modo de ser de un pueblo, o si se va a cambiar”.

La excusa que se utilizó para no afrontar ese debate fundamental fue “la falta de ordenación estructural de Valle de guerra”, es decir que como la forma de este asentamiento poblacional no ha obedecido históricamente a un modelo planificado --lo cual es característico de la práctica totalidad de las poblaciones tinerfeñas--, sino que se ha ido apoyando en las vías principales (la carretera TF-16, de Tejina a Tacoronte, y el Camino de Juan Fernández que viene también de Tejina) y en estrecha asociación con la economía agraria, pues no se discutió la “ordenación morfotipológica”, sino que se puso la decisión en manos de quienes elaboran las diferentes alternativas para Valle de Guerra.

La consecuencia principal de esa falta de debate ha sido la de que las principales alternativas tomadas en cuenta en la elaboración del PGO y, en definitiva, la ordenación de Valle de Guerra aprobaba inicialmente por el Gobierno Municipal va a suponer un cambio en la forma tradicional de relación con el territorio, sustentada en conceptos técnico-urbanísticos que se dan por indiscutibles y sin ninguna otra justificación: demandas y previsiones poblacionales objetivas, estrategias de desarrollo económico consistentes, preservación de los recursos naturales, en especial del capital de suelo agrícola…

Los elementos fundamentales de la ordenación, los de carácter estructural, que son las infraestructuras viarias y la clasificación de suelo son los que requieren una sólida justificación, ya que de ellos va a depender el modo de vida de una población.

Santiago Pérez señala que Valle de Guerra tiene déficits equipamientos y dotaciones que debe intentar resolver el planeamiento, pero sin trastocar las características de esta población. Por el contrario, lo que pretende el PGO es inducir un desarrollo urbanístico no justificado ni demandado por Valle de Guerra y, como consecuencia de ello, planificar un conjunto de nuevas vías para resolver necesidades futuras creadas por el propio PGO.

Los grandes espacios agrícolas interiores de Valle de Guerra son tratados meramente como espacios vacantes, es decir como un suelo residual que no puede tener otra utilidad que la de ser urbanizado.

La tipología residencial de Valle de Guerra, que el propio PGO reconoce que es la de viviendas unifamiliares de una o dos plantas, se abandona precisamente en esos espacios centrales donde se proyectan las principales actuaciones urbanísticas, en las que el propio PGO reconoce que se concentran las edificaciones de tipo colectivo, “alcanzando las 3 y 4 plantas”.

Para poder llevar a cabo estas importantes actuaciones urbanísticas el PGO prevé la ejecución de un potente sistema de vías “con potencia suficiente para que sirvan de soporte al tráfico inducido”.

“Urbanizar los espacios agrícolas centrales y bautizar, al propio tiempo, a las nuevas vías que se van a ejecutar en esos espacios la “espina verde” de Valle de Guerra parece un sarcasmo. Si la forma de asentamiento de Valle de Guerra y algunos de sus equipamientos y actividades económicas se apoyan especialmente en la  carretera Tejina-Tacoronte, lo razonable será reforzar el carácter estructurante de esa vía, identificando a lo largo de su recorrido las centralidades reales de esa población y reforzarlas”, añade Pérez.

“Eso –continúa diciendo-- permitiría abrir la discusión razonable sobre el trazado de la variante prevista por el Sur de la TF-16 (carretera general Tejina-Tacoronte) desde la zona del Cementerio hasta su enlace a la altura de la Casa de Carta, convirtiendo la Carretera General en la zona central de Valle de Guerra en una vía urbana”.

El Gobierno del Ayuntamiento no ha sido capaz de explicar satisfactoriamente la justificación de las grandes previsiones urbanizadoras al interior de Valle de Guerra, que popularmente ya son conocidas como la operación de El Bulevar. Por otro lado, en las contestaciones a las alegaciones de la ciudadanía cuestionando esa operación urbanizadora, se han limitado a “tapiarlas” para que no se vean, como comentaba un destacado representante de la Plataforma de Tejina.

Es decir, renuncian a ordenarla directamente en el PGO cambiando la calificación de Suelo Urbanizable Ordenado, pero manteniendo a ese amplio espacio de suelo agrícola como Suelo Urbanizable --para llevar a cabo la misma actuación, cuyos objetivos y criterios urbanísticos anunciados deberán figurar en la correspondiente Ficha-- y aplazando su ordenación detallada a un Plan Parcial de desarrollo del PGO. Y cambiándole el nombre al Bulevar, la vía central, y reduciendo su anchura.

En definitiva, el PGO para Valle de Guerra es un claro ejemplo de cómo se impide el debate y la participación ciudadana sobre los elementos esenciales del futuro planeamiento, que son los que van a afectar a la forma de vivir y de ser de ese pueblo, para respetarla y mejorarla o para alterarla profundamente. La propuesta de ordenación aprobada inicialmente cambia profundamente Valle de Guerra sin que se haya demostrado que ello obedezca ni a demandas, ni a necesidades ni a intereses generales de la población. Sólo es la inercia a favor de un modo de desarrollo que ha llegado a sus límites y que, en demasiadas ocasiones, ha supuesto la destrucción irreversible de patrimonio colectivo que debe ser preservado, en beneficio exclusivo de intereses particulares.