Buscar
sábado, 27 de abril de 2024 14:05h.

ÁFRICA:DESNEOCOLONIZACIÓN Y SEGUNDA Y DEFINITIVA INDEPENDENCIA O MIGRACIÓN INTERMINABLE

África: año nuevo, deuda vieja - por Marco Bersani

 

fr m b
Francisco Morote, de Attac Canarias, recomienda este artículo. Y yo, Chema Tante, reuerdo una vez más que lo que pase en África afecta muy directamente a Canarias. Es desolador que la opinión publica isleña ignore estas cuestiones 

África: año nuevo, deuda vieja

Marco Bersani

Attac Italia *

Thomas Isidore Sankara por JonaRasTarzan CC BY-NC-ND 3.0 DEED  
Thomas Isidore Sankara por JonaRasTarzan CC BY-NC-ND 3.0 DEED  

Artículo publicado en el manifiesto del 6 de enero de 2024 para la columna Nuevas Finanzas Públicas

El nuevo año comienza con el default de Etiopía : poco antes de Navidad, el gobierno del segundo país más poblado del continente declaró que no podría pagar la cuota de 33 millones de dólares a los fondos de pensiones y otros acreedores del sector privado que poseían el correspondiente bono. .

La quiebra de Etiopía es la tercera registrada en África después de la pandemia: Zambia abrió el camino en noviembre de 2020 y Ghana la siguió en diciembre de 2022.

Las consecuencias de la crisis del Covid-19 contribuyeron, por un lado, a agravar la situación, con un aumento del déficit presupuestario y una desaceleración del crecimiento económico, y, por otro, el aumento de los tipos de interés decidido por la Reserva Federal de los Estados Unidos, que había efectos devastadores sobre las deudas externas denominadas en dólares.

Como se puede comprender, no se trata de casos aislados sino de una situación que afecta a todo el continente: según datos del Banco Mundial, el porcentaje de países africanos en alto riesgo o ya en situación de deuda ha pasado del 27% en 2015 al 55%. en junio de 2023 , mientras que la carga de la deuda de los países del África subsahariana, es decir, las sumas destinadas al pago de intereses, pasó de 59 mil millones en 2012 a 109 mil millones en la actualidad.

A este panorama hay que añadir el cambio en la composición de la deuda, que se tradujo en una clara disminución de la proporción de préstamos denominados "subsidiados" proporcionados por la "ayuda pública al desarrollo" y un aumento exponencial de los préstamos bilaterales contratados por acreedores privados. . Lo que hace que el panorama sea aún más vulnerable: según los datos del Banco Mundial, el coste de los intereses de la deuda de toda la región alcanzó el 31% de los ingresos en 2022 y ya es previsible un nuevo salto adelante en los próximos dos años.

Un marco muy grave que, al poner en peligro cualquier inversión pública de los gobiernos de los países africanos, impide por supuesto cualquier cambio de rumbo en dirección a la cada vez más necesaria justicia climática y social. Reproduciendo bajo otras formas -tarjetas de crédito en lugar de tanques- las dinámicas coloniales del extractivismo, la depredación de los bienes comunes, la explotación y la pobreza que siempre han caracterizado la relación entre el mundo rico y el continente africano.

No se puede afrontar ninguna crisis ecoclimática sin condonar la deuda, porque aceptarla significa prepararse para su pago ya sea mediante este crecimiento económico (que empeora la situación ecológica) o mediante la drástica reducción del gasto en salud, educación, servicios y derechos públicos.

Vale la pena recordar aquí las palabras pronunciadas el 29 de julio de 1987 por Thomas Sankara, revolucionario y presidente de Burkina Faso, en la cumbre de la Organización de la Unidad Africana en Addis Abeba, Etiopía: "La deuda no se puede pagar, en primer lugar porque si no lo devolvemos, los prestamistas no morirán. Esto es seguro. Pero si pagamos, moriremos. Esto también es seguro. Quien nos endeudó jugó como en un casino. Mientras tuvieran ingresos, no había debate. Pero ahora que sufren pérdidas, piden un reembolso. Y hablemos de crisis. No, señor presidente, jugaron, perdieron, ésta es la regla del juego y la vida continúa”. .

El discurso de Sankara concluyó con un sombrío presagio: "Si Burkina Faso es el único que se niega a pagar, ya no estaré aquí para la próxima conferencia" y, de hecho, fue asesinado tres meses después por un complot interno, apoyado por Francia, Estados Unidos y Libia.

Han pasado 40 años desde entonces, pero si África no toma el camino trazado por Sankara cualquier 'paso adelante' sólo será hacia el abismo.

* Gracias a Marco Bersani y Attac Italia y a la colaboración de Francisco Morote, de Attac Canarias

https://attac-italia.org/africa-anno-nuovo-vecchio-debito/

MARCO BERSANI
MARCO BERSANI

 

 

 

 Miembro fundador de Attac Italia y CADTM Italia

ATTAC ITALIA

 

mancheta pequeña