¿Por qué las empresas pagan a los partidos hegemónicos? Porque les bajan los impuestos. Pero el FMI sigue pidiendo bajar salarios
Sin recobrarnos del espanto suscitado por las confesiones de Rajoy, de que es memo o es un ratero, en todo caso, ignorante; ni de la angustia que provoca comprobar como el afán por el beneficio a cualquier precio se ha cobrado más de ochenta personas muertas y centenares de heridas, vuelven las noticias económicas a golpear nuestras cabezas, llevándonos de nuevo a la exasperación. El informe anual de recaudación fiscal indica que las grandes empresas pagaron casi 10.000 millones de euros menos en 2011, respecto al 2006: pasaron de 12.673 millones a 3.012. Pero, al mismo tiempo, las multinacionales siguen exigiendo ¡justicia tributaria! y el FMI vuelve a recomendar ¡bajar los salarios!
Añadan a esos 10.000 millones de euroa anuales la canidad incalculable que supone la evasión fiscal, más lo que supone la corrupión (el TIDES de la ULPGC lo establecía en 40.000 millones); más lo que el estado benevolente les perdona a las grandes fortunas, y estarán de acuerdo conmigo en que todas las desgracias que nos atribulan estarían resueltas y el estado de bienestar se consolidaría, la actividad económica será boyante, simplemente consiguiendo que las grandes empresas y fortunas paguen lo que les corresponde.
Pero no, tanto el partido nada popular como el partido ni socialista ni obrero, o la convergencia unida para la riqueza o la coalición contra Canarias, convertidas en empresas mercatiles se han erigido e n paladines de las tyeorias neoliberales de Friedman. La gran mentira de que la bajada de impuestos a los beneficios activa la economía, porque las empresas dirigen el ahorro a la inversión ha demostrado sus funestos efectos. Simplemente, porque las grandes empresas y fortunas dedican el remanente de recursos que los estados les perdonan, a la especulación financiera, que crea dinero artificial y que ataca a los mismos estados que les beneficiaron.
Esta verdad, no ya repetida, sino confirmada por la evidencia de los hechos, está lejos de ser aceptada por los ultraliberales, que insisten, como si no pasra nada, en exigir que se mantenga la aplicación de estas medidas. Unas medidas que no son un error. Todo lo contrario, son un acierto. Pero un acierto en el sentido ocultoa, en el que no reconocen. Porque se trata de las medidas que buscan recuperar para los ricos los privilegios y reducirno al resto de los mortales a la esclavitud.
http://economia.elpais.com/economia/2013/08/01/actualidad/1375387796_323438.html
http://www.elboletin.com/nacional/81281/gestha-hacienda-sociedades-recortes-sanidad.html
http://enpositivo.com/2013/07/justicia-tributaria-para-corporaciones/