Nota de Chema Tante:

Este artículo de Eduardo Pérez Hernández constituye un testimonio de primera mano de la manera estúpida en que funciona una empresa pública de eminente importancia estratégica para Canarias. GMR, Gestión del Medio Rural de Canarias, es la empresa pública, propiedad del Gobierno de Paulino, encargada de proteger e impulsar al sector primario de las islas, promocionando sus productos y apoyando a los productores. En teoría, GMR cumple con su misión actuando en dos campos. Por un lado asesora técnicamente a productores y ganaderos, ayudándoles a organizar su actividad. Y por el otro, opera en el mercado, comercializando los productos hortofrutícolas y ganaderos insularesa, respetando la libre competencia, pero renunciando a parte de los altísimos beneficios que se obtienen en la intermediación. De esta manera, ofrece precios más altos en origen y más bajos al consumo. Con eso, GMR -siempre en teoría- contribuye a racionalizar la caótica actividad intermediaria en el mercado agroalimentario. Pero la realidad es muy otra. Lo que denuncia Eduardo Pérez Hernández no es un caso concreto, aislado. La torpe gerencia de esta empresa pública ignora sistemáticamente su función y, con el peregrino pretetxto de "ofrecer un portafolio integral" vende producto importado, incluso cuando, como en este caso, haya existencias de género local. Insisto en que no es cierto lo que le respondieron a Eduardo "esto no lo solemos hacer". Se trata de una práctica constante. Esto es una cuestión extremadamente perjudicial que demuestra el grado de ignorancia existente en los ámbitos gubernamentales canarios. Dice Eduardo Pérez Hernández:

"A día de hoy, 28 de septiembre de 2012, Gestión del Medio Rural (GMR), empresa pública del Gobierno de Canarias, está comercializando papa King Edward, sí (no papa Quinegua producida aquí) papa King Edward importada de Reino Unido. En este país es lo que hay, así es la política agraria del Gobierno de Canarias.

Es grave es, por eso lo publico. La papa de importación la encontré en un almacén de GMR, un palé de sacos. Al preguntar de dónde eran, me dijeron que eran papas de importación, y que eso no lo solían hacer pero que no habían encontrado papa de Canarias y tenían que servir a los clientes. A mí me parece un hecho gravísimo y que hay que denunciar para que no se repita.

1.- Considero que GMR es una empresa pública necesaria para el sector agrario, y también su sección comercial y que es injusto el ERE que están padeciendo sus trabajador@s. Pero hechos como éste de comercializar papa importada son lo suficientemente graves como para reconsiderar sus líneas de actuación. Y son consecuencia de la política agraria para el mercado local, inexistente en la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, no de ahora, sino de siempre.
2.- Existe papa local en el mercado, y si GMR quiere comercializar papa, debe hacerlo con papa del país y comprarla al agricultor al precio que el santificado por el Gobierno de Canarias “libre mercado” determina en este momento o no comercializar papa. Tiempo ha tenido el Gobierno de Canarias para planificar políticas encaminadas a alcanzar mayor capacidad de soberanía alimentaria (que no autosuficiencia alimentaria) potenciando la agricultura familiar para el mercado local a través del POSEI, regulando los precios de los alimentos y estableciendo aranceles a la importación de alimentos bajo dumping (alimentos que se comercializan en Canarias por debajo de su precio de producción). Tiempo ha tenido y tiempo tiene."