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miércoles, 08 de mayo de 2024 16:16h.

Carta abierta a Isaac Valencia - por José Manuel Hernández

Nota de Chema Tante:

Esta Carta abierta fue enviada a varios medios de comunicación comerciales, sin que haya sido publicada hasta el momento, ustedes y yo sabemos el porqué. Y antes de que aparezca algún cuestionamiento malintencionado, yo afirmaré que las victorias de Isaac Valencia sobre los partidos de la oposición en La Orotava, incluída IpO, se han conseguido, no por sus virtudes democráticas o de gestión, sino apoyándose en la cobertura mediática masiva y en el aprovechamiento maligno de los resortes de poder.

Dice José Manuel Hernández: "Adios señor Valencia. Así, sin más cortesía. Usted, sinceramente, no se la merece..."

Carta abierta a Isaac Valencia - por José Manuel Hernández, militante y exconcejal de Iniciativa por La Orotava, IpO

Adios señor  Valencia. Así, sin más cortesía. Usted, sinceramente, no se la merece. Se marcha dejándonos, una vez más, la vergüenza ajena en nuestros rostros, afrentando a nuestro pueblo con sus palabras, mientras sus compañeros de partido ríen sus gracias bajo la excusa de ser “cosas de viejo”. Pero aquí no hay nada de qué reirse. Quien, en sus filas, no denuncie su verborrea filofascista, será que la comparte. Sus recientes declaraciones misóginas y machistas (“el hombre no puede estar encerrado en casa todo el día, se vuelve loco. La mujer sí”); xenófobas (“el moro es una persona muy traicionera”); prepotentes, soberbias, arrogantes y vanidosas (“yo nunca me he equivocado”); ofensivas, despectivas e injuriosas (“¿qué hacen si no tienen donde trabajar? Pues se dedican a robar, que es lo que está pasando”, en referencia a los vecinos y vecinas de Añaza); insultantes y despectivas con otros municipios (“lo que tienen que hacer es coger un camión de los grandes llenos de zotal y fregar el Puerto, que está lleno de basura por doquier”) y con las opiniones que no coinciden con las suyas (“la ruindad está a flor de piel”, en referencia a las denuncias por el caso El Trompo, en el que usted está procesado por la justicia), no hacen sino poner en evidencia una forma de gobernar y de actuar en política firmemente anclada en el más rancio de los franquismos, ése en el que usted se crió, que no combatió y que le sirve de inspiración.

Usted ha sido el alcalde de la imposición y el desprecio a la diversidad. Somos muchas las personas en La Orotava las que hemos sufrido su autoritarismo y su menosprecio, por no coincidir con sus ideas. Ha sido el alcalde solo de los que votaban por su partido. Nunca el alcalde de toda la ciudadanía. Ha aprovechado discursos institucionales para ofender cualquier disenso respecto a su política. Ha sido usted, desde el punto de vista estrictamente político, un auténtico cobarde, pues nunca quiso debatir en público, en los medios de comunicación, en clara igualdad, con la oposición, particularmente con quien esto escribe y con el grupo al que he representado. Siempre se dedicó a descalificar desde tribunas en que nadie podía contestarle ni defenderse. Ha sido usted el alcalde del enchufismo más descarado, favoreciendo sin recato alguno, a sus partidarios, creando una red de estómagos agradecidos para garantizarse una elección tras otra. Ha sido usted el propulsor del capitalismo salvaje y del neoliberalismo, impulsando la implantación de las grandes empresas multinacionales en nuestro Valle y amparando y propiciando la especulación más destructiva que haya conocido nuestro territorio en toda su historia. Usted es el sepulturero oficial del pequeño y mediano comercio. Ha sido el alcalde de los grandes empresarios y el que se jactaba al decir que sus votantes no leían los periódicos y que no importaba lo que éstos dijesen. Ha sido el alcalde que ha mentido a la ciudadanía, como cuando, aprovechándose de la confianza de muchos vecinos y vecinas, les decía que si la oposición gobernaba, le iban a tirar sus casas. Ha sido usted el alcalde de la intolerancia y del “estás conmigo o estás contra mí”. Ha sido usted quien alabó la cultura del cemento, el enriquecimiento fácil, la especulación, el favoritismo hacia sus amigos empresarios y el consumismo desaforado. Las consecuencias, 6.300 personas en desempleo oficial en La Orotava (a pesar de que usted lo niegue) y en torno al 50 % de la población sin superar la educación primaria. En nuestro municipio usted fue el adalid del modelo económico que está llevando a la desesperación a miles de familias. Por eso no nos duele que se marche.

No vamos a echar de menos su conservadurismo intransigente, su paternalismo autocrático y su despótica acción de gobierno. No extrañaremos su manipulación burda de la realidad de nuestro pueblo, escondiendo bajo la alfombra, siempre, la miseria, la pobreza, el paro, las desigualdades, los fracasos, los descontentos y todo aquello que pudiera empañar su imagen infantil, falsa, interesadamente distorsionada de una Villa en la que, solo según usted, no hay paro, ni fracaso escolar, ni nada que pueda ensombrecer el chovinismo ramplón en el que usted se ha movido y que le lleva a afirmar que somos lo mejor del mundo mundial. En todo. Vivimos en un mundo idílico y, por eso, hay que acallar cualquier cuestionamiento. Así ha actuado usted, siguiendo la estela de las mejores dictaduras.

Es por todo eso que miles de personas en La Orotava no vamos a echarle de menos. Todo lo contrario, algunas hasta brindarán por su marcha. Adiós, Sr. Valencia.

José Manuel Hernández (exconcejal y militante de IpO)