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viernes, 10 de mayo de 2024 00:00h.

Dicen que el ministro Soria es rencoroso - por Isidoro Sánchez García

Con motivo de las energéticas reflexiones veraniegas acerca de la "deforma" eléctrica aprobada por el gobierno Rajoy, a propuesta del ministro del ramo energético José Manuel Soria, se ha destapado la caja de los truenos. Nunca mejor dicho porque agosto está resultando un mes propicio para una buena tormenta de verano donde Soria nos recuerda, por su martillo machacón, al dios vikingo Tor. Menos mal que tenemos por acá a ciertas Vírgenes como las Nieves o la de Candelaria, o la santa Catalina, que nos protegen por ser patronas de recursos como el agua, las candelas o las ruedas, respectivamente. Quien está de capa caída es la Virgen de los Reyes, en la isla bimbache del Meridiano, El Hierro, por culpa de la negativa del ministro canario en autorizar la puesta en marcha de la central hidroeléctrica de La Gorona.

Dicen que el ministro Soria es rencoroso - por Isidoro Sánchez García, Miembro de la Plataforma por un nuevo modelo energético para Canarias. (PX1NMEC)

Con motivo de las energéticas reflexiones veraniegas acerca de la "deforma" eléctrica aprobada por el gobierno Rajoy, a propuesta del ministro del ramo energético José Manuel Soria, se ha destapado la caja de los truenos. Nunca mejor dicho porque agosto está resultando un mes propicio para una buena tormenta de verano donde Soria nos recuerda, por su martillo machacón, al dios vikingo Tor. Menos mal que tenemos por acá a ciertas Vírgenes como las Nieves o la de Candelaria, o la santa Catalina, que nos protegen por ser patronas de recursos como el agua, las candelas o las ruedas, respectivamente. Quien está de capa caída es la Virgen de los Reyes, en la isla bimbache del Meridiano, El Hierro, por culpa de la negativa del ministro canario en autorizar la puesta en marcha de la central hidroeléctrica de La Gorona.

Menos mal que los herreños están acostumbrados a caminar cada cuatro años acompañando a la Virgen desde la dehesa comunal hasta la capital de la isla, en la Bajada tradicional, y desde Valverde a la ermita construida por los pastores junto a la montaña del Caracol. También los habitantes de El Hierro recuerdan la historia del árbol Garoé, que hasta 1610 captaba el agua que venían en las nubes procedentes del Atlántico, empujadas por los vientos alisios desde el NE, y la repartía en albercas para mitigar la sede de las personas y los ganados. La culpa de su pérdida la tuvo un temporal que derribó el árbol sagrado. Por ello quizás no se enfaden mucho ahora al conocer las decisiones políticas del paisano Soria, respecto a la puesta en marcha de esa central hidroeólica que se ha terminado de construir en la Gorona del Viento, al pie de Ventejís. 

Es que en 1948 se plantó en el barranco de Tigulate otro árbol Garoé, un til de la familia de las lauráceas, para replicar el fenómeno garoetizante. Paralelamente el proyecto de La Gorona, en este siglo de las energías renovables y de la información, es decir en la tercera revolución, ha venido a ser el Garoé del siglo XXI y se ha convertido en un referente mundial de la sostenibilidad medioambiental. Ahora habrá que esperar a que se vaya pronto el ministro por algún vendaval político que aparezca o denunciarlo por prevaricación. Argumentos no faltan. No sólo por el caso de La Gorona sino también por pasividad política, al no proponer al gobierno Rajoy una norma específica para Canarias en materia de reforma eléctrica, que permita garantizar los principios constitucionales de las empresas y ciudadanos que residimos en este archipiélago atlántico, geográficamente insulares africanos y políticamente ultraperiféricos europeos, y que nos hemos vistos afectados por la actitud de un irresponsable político y por la inseguridad jurídica que ha generado en el mundo de la energía. Por ello tengo mis serias dudas acerca de la marca España que tanto le gusta pregonar por ahí fuera. Lo que está consiguiendo es un ejercicio práctico de des-gobierno total y absoluto.

 Espero que Soria no sea rencoroso, a pesar de lo que me ha dicho un destacado periodista inmerso en el sector energético. Y con el asunto de La Gorona confío en que Narvay Quintero, senador por la isla de El Hierro, le recuerde al ministro la traición de Catilina a Cicerón en el senado de Roma hace más de dos mil años. Le sugiero que le formule una de las históricas "catilinarias" políticas: ¿Cuándo acabará esta desenfrenada audacia tuya?  


Isidoro Sánchez García 

Miembro de la Plataforma por un nuevo modelo energético para Canarias. (PX1NMEC)

http://www.nuevomodeloenergetico.org/pgs2/index.php/nodos/canarias/