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sábado, 18 de mayo de 2024 02:31h.

“Oju la jambre” - por Antonio Francisco González Sanabria

 Con esta forma de hablar, en Andalucía nos referimos a ese periodo de tiempo en que, en esta nuestra nación no había comida, se nos salvó de nosotros mismos con una destrucción  total de la economía española mediante una guerra civil. Después de  decir esto y al leer la noticia del fallecimiento, por la (supuesta) ingesta de alimentos en mal estado, de tres miembros de una misma familia en este mi pueblo, Alcalá de Guadaíra, no dejo de pensar en aquel articulo que en su momento escribí sobre la comercialización de productos caducados, que el gobierno Griego había autorizado vender en los supermercados en dicho país.

“Oju la jambre” - por Antonio Francisco González Sanabria

            Con esta forma de hablar, en Andalucía nos referimos a ese periodo de tiempo en que, en esta nuestra nación no había comida, se nos salvó de nosotros mismos con una destrucción  total de la economía española mediante una guerra civil. Después de  decir esto y al leer la noticia del fallecimiento, por la (supuesta) ingesta de alimentos en mal estado, de tres miembros de una misma familia en este mi pueblo, Alcalá de Guadaíra, no dejo de pensar en aquel articulo que en su momento escribí sobre la comercialización de productos caducados, que el gobierno Griego había autorizado vender en los supermercados en dicho país.

            Este luctuoso suceso,  que ha levantado todo tipo de reacciones, dependiendo  según la versión que se oiga, tanto en los medios, como en la calle, ha sido provocado por esta (supuesta) ingesta de alimentos en mal estado, alimentos que según se cuenta, fueron recogidos de un contenedor. Algo que esto en nuestro país no es nuevo, recordaremos que el  New York Times ya publicó hace meses, que  mientras el presidente del Gobierno se fumaba un purazo en New York, los españolitos asaltaban la basura para poder comer, el rebusco de comida en España es algo viejo, empezó hace ya algunos años, yo mismo lo he podido ver en multitud de ocasiones, esto ya pasaba justo cuando los políticos españoles empezaron a ver brotes verdes y a fabricar alianzas de civilizaciones, permitiendo el blanqueo de grandes sumas de dinero con el consabido endeudamiento del pueblo a favor de la usura de la banca, pero lo peor es que esto ha continuado con el actual gobiernos, esa subida salvaje de impuestos junto con el paro galopante que nos azota, el recorte de pensiones y la perdida de todos los derechos adquiridos por la clase obrera durante décadas.

            Los políticos al no tener ninguna forma de solucionar los problemas que ellos mismos han creado, nos cuentan milongas como la comerse un yogurt caducado, diciendo que eso y ducharse con agua fría,  es  una forma de ahorrar en nuestra economía y sobre todo de no malgastar recurso limitados.

            Lo que no nos dicen nuestros políticos, es que ellos si tendrán comida en sus mesas estas tristes y pobres navidades, que sus hijos y nietos si tendrán regalos, para vivir ese espíritu navideño que tanto pregona la coca-cola, (por cierto esta compañía gestionará el banco de alimentos ¡uuuuf!), que ellos no van a tomar yogures caducados y porquerías caducadas de los contenedores, cenaran y disfrutaran a mesa y mantel sin querer enterarse del sufrimiento en el que han sumergido al pueblo.

            Seguirán meandose en la carta magna, donde dice en su titulo preliminar  ( copio textualmente por segunda vez): España es un estado social, El estado esta obligado a solucionar los problemas sociales y económicos de los ciudadanos, una de su finalidades es promover el desarrollo de la cultura y de la economía, para asegurar a todos una digna calidad de vida y sobre todo actuar a favor de una serie de grupos más indefensos, protección a la familia, y a la educación, a los trabajadores y a la juventud, a minusválidos, y menores, a la salud, a la cultura y al medio ambiente, ancianos y consumidores. Como se ve la constitución es sustituida por los yogures pasados de fecha, supliendo estos “señores” sus obligaciones hacia el ciudadano con la solidaridad del pueblo y de las ONGs,  se harán las fotos de rigor y olvidaran pronto que están o deberían estar al servicio de quien les votó y no a sus bolsillos e intereses, olvidando pronto que aquellos a los que dicen defender y proteger, los han llevado a la miseria, a perder sus trabajos y sus casas y finalmente a la muerte por no poder comprar alimentos en optimas condiciones de consumo.

            Cuando alguien al que cualquier compañía terrorista le amenaza con cortarle la luz o el agua, no es para dentro de seis meses, es de inmediato, cuando tienes hambre no puedes esperan a que se reunía la comisión de turno a decidir sobre tu vida, la necesidad es inmediata, nadie puede esperar tres meses, dos semanas o dos días sin luz, agua o alimentos, son necesidades inmediatas, ¿como hay que gritárselo a esos ineptos que son nuestros supuestos dirigentes?, las obras megalómanas y faraónicas no se comen, ni dan riqueza a nadie, solo a los de siempre, para los demás  deudas y problemas para resolver dichos desmanes, Alcalá no es ese paraíso que se empeñan en tratar de venderte unos y otros, no es el mejor sitio al Sur de España para vivir, ni siquiera es mejor sitio del Norte de África donde estar, por muchos periódicos que se editen y paguen para auto bombo. Recuerda bastante bien, lo de darse palmaditas en la espalda mientras el pueblo sufre y padece “Jambre” , a la orquesta del Titanic, que tocaba y tocaba mientras las oscuras aguas del Atlántico se los tragaba.

Antonio Francisco González Sanabria