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viernes, 26 de abril de 2024 03:37h.

Dos pasos al frente y 15 diputados al Parlamento de Andalucía - por Marco Lojo

Podemos es la tercera fuerza política de Andalucía. Quince escaños fruto del voto de miles de andaluces y andaluzas que han dicho un doble no: el no a los recortes, a los desahucios, a la pobreza provocada por la inquina de un Gobierno contra las clases populares; pero también, el no a las redes clientelares, al mimo a los terratenientes y al látigo del paro, a la falta de vergüenza de aquellos que representando la defensa de los trabajadores, les roban a manos llenas.

Dos pasos al frente y 15 diputados al Parlamento de Canarias - por Marco Lojo *

Podemos es la tercera fuerza política de Andalucía. Quince escaños fruto del voto de miles de andaluces y andaluzas que han dicho un doble no: el no a los recortes, a los desahucios, a la pobreza provocada por la inquina de un Gobierno contra las clases populares; pero también, el no a las redes clientelares, al mimo a los terratenientes y al látigo del paro, a la falta de vergüenza de aquellos que representando la defensa de los trabajadores, les roban a manos llenas.

En el inicio del año del cambio, Teresa Rodríguez nos ha demostrado no sólo que otra política es posible, que puede triunfar en un Parlamento lleno de arribistas, de sinvergüenzas y  de fachas; sino que, además, que otro Podemos es posible -y necesario-. La que se supone que "debía echarse a un lado" después de la Asamblea de Vistalegre, no sólo ha dado dos pasos al frente: ha dado 15 representantes de ese frente popular solidario por el cambio en Andalucía. Y eso, pese a horas y horas de televisión cuya manipulación mediática ha intentado burdamente relacionar Podemos con la corrupción -por el mal llamado "caso Monedero"-, con la relación de las carestías en Venezuela -como si hubiesen elementos comunes-, y por si fuera poco con las propias torpezas de una dirección que afirmó la escasa posibilidad de victoria de la gaditana.

De esas lecciones debíamos tomar nota en Canarias. Desde el "vae victis" a los elefantes en cacharrerías, de una mal llamada confluencia que no es sino la confrontación permanente y la lucha por colonizar los órganos de dirección, al hechovde que siempre se pueden hacer las cosas de forma diferente, deberíamos concluir:

1. Que 520.000 canarias y canarios en la pobreza bien merecen un partido de combate que se presente unido en su diversidad para darles solución en su desesperanza, sin protagonizar bochornosos desembarcos y sin siniestros personajes que han protagonizado las piedras del camino de un pueblo que lucha por su supervivencia.

2. Que la confluencia es posible si los grupos que están dentro de Podemos actúan con lealtad y coherencia, no compitiendo con siglas propias allá donde no tengan la hegemonía. Porque el compromiso con Podemos no debe tener medias tintas: es un compromiso con el pueblo.

3. Que en Podemos la pluralidad y la participación es una suma y no una resta, como quieren presentarnos aquellos que sólo entienden la política hecha, votada y enmendada por ellos mismos. La política, aquellos que la entendemos como herramienta para la transformación social, es el mecanismo para el cambio social que parte de la intransigencia en la negociación de los derechos de los de abajo con los de arriba, pero en el entendimiento con las y los compañeros que estamos en la estrategia del fin del austericidio.

4. Que es necesario volver a ganar las calles. La política que sólo se ve a sí misma termina en el narcisismo y acaba ahogada en el estanque de su irrealidad. El favor de los medios es tan caprichosa como la voluntad de los millonarios que dictan lo que se debe ver: y en Canarias encierran, expulsan y mueren de inanición personas sin que hayan altavoces para la denuncia de su sufrimiento.

5. Que la fraternidad es el gran valor olvidado de la democracia, como demuestran día a día los movimientos sociales. No sólo en la reivindicación igualitaria ha de verse la dignidad del ser humano, sino en la dignidad que le otorgo al otro por el hecho de ser otro y verlo como otro ser humano. Podemos está comprometido con los derechos humanos: y ese, decía la constitución jacobina de la revolución francesa, es un derecho fundamental. Por otro Podemos fraternal, por un pueblo libre, igual, fraternal, solidario. 

* Publicado con autorización del autor