Explicar, en vez de ocultar, al ignorantado pueblo el significado de la descolonización - Movimiento por la Unidad, Descolonización e Independencia del Pueblo Canario (Movimiento UPC)

. Canarias constituye una posesión colonial española en el Noroeste de África desde aquel aciago año de 1402, en el que tuvo lugar el primer asentamiento del colonialismo español en el Rubicón, Titerroygakat (ex Lanzarote) y, hasta donde llega nuestro mejor conocimiento, aún no ha sido descolonizada, por lo tanto, sigue siendo una colonia, lo que significa una nación esterilizada culturalmente, expoliada económicamente y sometida militarmente.

Pedagogía anticolonialista. Políticamente, en una colonia se es anticolonialista o colonialista. Probablemente nunca han existido tantos anticolonialistas en Canarias como en la actualidad y esto no es una apreciación interesada y subjetiva, sino que así lo demuestran las encuestas realizadas incluso con preguntas tan capciosas y demagógicas como: “¿Te sientes más canario que español?”, “¿Te sientes igual de canario que español? ”, “¿Te sientes sólo canario?” (Esta siempre al final), realizadas por las propias universidades españolas en Canarias, así como por el ejército español de ocupación y otras instituciones, todas ellas al servicio del fascista régimen monárquico y colonial español. Pues la buena noticia es que, incluso con estas vergonzosas, por amañadas, encuestas una mayoría aplastante de nuestro pueblo rechaza ser español, como afirmaba el político conservador español Cánovas del Castillo: “Nadie quiere ser español”.

En Canarias, hasta el independentismo está al servicio del colonialismo. Sistemáticamente aparecen y desaparecen en esta desdichada colonia organizaciones, tanto políticas como sindicales e incluso culturales y deportivas  que, amparándose en nuestra enseña nacional, la bandera tricolor (Blanco, azul celeste y amarillo), con 7 estrellas verdes (8 considerando La Graciosa), limitan su manifestación anticolonial pública a confusas consignas para un pueblo ignorantado por más de seis cientos (600) años de colonialismo tales como: “Por el derecho a decidir”, “Más soberanía”, “Autodeterminación”, “Canarias libre y socialistas” e incluso “Canarias libre y musical” por poner sólo algunos ejemplos.

La independencia es para todas las canarias y todos los canarios. La independencia es para todas y todos los que habitamos esta nación aún sin Estado, independientemente de su ideología. Parafraseando al compatriota Secundino Delgado: “El apostolado hay que hacerlo entre todos los paisanos, independientemente de su ideología”, frase que asumimos en su integridad pues, en justicia, el proceso de emancipación o liberación nacional en para los demócratas, los ácratas, los marxista-leninistas, los anarco-marxistas, los cristianos e incluso para los músicos, faltaría más, haciendo honor a la consigna del Conservatorio “Canarias libre y musical”, proceso de liberación que será más rápido si, en vez de disgregar nuestras fuerzas, las concentramos en un sólo sentido, el de la DESCOLONIZACIÓN y  proclamación de la INDEPENDENCIA.

En conclusión, el Movimiento por la Unidad, Descolonización e Independencia del Pueblo Canario (Movimiento UPC), haciendo honor a la única consigna libertaria en una colonia, la DESCOLONIZACIÓN e INDEPENDENCIA, ha introducido la misma en su denominación en los recientemente modificados estatutos para que no quepa duda alguna, sin subterfugios que sólo al colonialismo benefician, dónde no cabe ningún proceso de autodeterminación dado que esta se ejerce mediante un referéndum y jamás el colonialismo realizó referéndum alguno para preguntarnos si queríamos ser sometidos, masacrados, envilecidos, deportados, esclavizados o asesinados mediante genocidio, crímenes de lesa humanidad que no prescriben ni con el paso de los siglos según las Naciones Unidas, de las que forma parte España, por lo tanto, en lugar de la autodeterminación procede la aplicación de la Resolución 1514(XV) de las Naciones Unidas sobre la concesión de la Independencia a las Naciones y Pueblos sometidos por la lacra del colonialismo en definición de las propias Naciones Unidas, lo que implica indemnizaciones a nuestro pueblo por los años de colonialismo y van más de 600.