La Laguna. La oposición denuncia que familias de Las Vistillas con la luz cortada siguen recibiendo facturas inasumibles

Insisten en que es urgente encontrar una solución entre el Ayuntamiento, Endesa, Visocan y Muvisa

Los concejales de la oposición de izquierdas en el Ayuntamiento de La Laguna, Juan Miguel Mena y Nacho Viciana, quieren denunciar públicamente que algunas de las familias de las 132 familias del edificio La Vistilla, en Geneto, siguen recibiendo facturas desorbitadas por el consumo eléctrico a pesar de tener cortado el suministro.

Es el caso de una de ellas, que acaba de recibir una factura de 106,96 euros por el período comprendido entre el 21 de agosto y el 21 de octubre, a pesar de asegurar que llevan más de mes y medio con la luz cortada por impago. Sin embargo, en el detalle de la factura se puede observar que además del consumo se le cobra la potencia por el espacio de 61 días.

Mena y Viciana insisten en que es urgente encontrar una solución entre el Ayuntamiento, Endesa, Visocan y Muvisa y así se lo han solicitado por escrito y vía Registro el pasado lunes al alcalde, Fernando Clavijo, porque familias que residen en viviendas sociales por las que pagan una media de alquiler de 50 euros mensuales no pueden tener encima una losa con facturas de luz que suponen entre 3 y 5 veces más que el alquiler de sus casas.

Los concejales añadieron que resulta evidente que algo extraño está pasando porque el problema es repetido y generalizado, afectando a muchas viviendas. Endesa no da respuestas a las familias que han protestado y los pocos que han pedido una inspección de sus contadores sólo obtienen el resultado de que todo está bien, además de tener que abonar 40 euros por la misma.

Tampoco es de recibo que la única solución que se aporta desde el Consistorio es recomendar a los vecinos que bajen la potencia de luz contratada de 5 a 3 kw, algo que ya han hecho varios, comprobando que el ahorro es solo de entre 60 y 80 céntimos bimensuales.

Pero éste último episodio de facturaciones superiores a los 100 euros a familias que llevan más de un mes con el servicio cortado parece una broma de mal gusto para familias que no cuentan con recursos suficientes, muchas de ellas monoparentales o sin ingresos, que tienen que acabar eligiendo entre hacer frente a los gastos necesarios para que vivan sus hijos o pagar la luz.