El Movimiento por el Frente Amplio reclama un dique para el barrio santacrucero de San Andrés

 El Movimiento por el Frente Amplio se une a las demandas de los vecinos de San Andrés sobre la urgente necesidad que tiene el barrio de un dique semisumergido para proteger su frente marítimo del oleaje en la pleamar.

Con frecuencia, casi todos los años, el fuerte oleaje de componente sur y nordeste que  azota este litoral provoca daños de consideración en el paseo marítimo y el antiguo muelle embarcadero. Así el oleaje de agosto de 2011 inundó hasta 80 m tierra adentro, quedando afectada la avenida Marítima e inundadas una treintena de casas y comercios.

 San Andrés  lleva solicitando la protección definitiva de su litoral más de 30 años y durante todo ese tiempo el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, la Autoridad Portuaria y el Gobierno Canario han esquivado su responsabilidad en la solución de este problema. 

A finales del 2012, por fin, el Ministerio de Fomento a través de Puertos del Estado ha asignado la cantidad  de dos millones y medio de euros para la realización del dique, pero los trabajos no han comenzado. Esto es debido a que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente no ha expedido la declaración de emergencia de las obras, declaración necesaria para que éstas se inicien cuanto antes. Es intolerable, dado el riesgo para la seguridad de los vecinos, que esta declaración,  a día de hoy, no se haya expedido por parte del Ministerio.

Por el motivo anteriormente expuesto, el Movimiento por el Frente Amplio demanda del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife una actuación contundente ante la tardanza de este Ministerio. El bloqueo del proyecto no puede continuar y al Ayuntamiento le corresponde resolver este problema definitivamente y con la mayor urgencia. 

 Recuerdan desde el MXFA que precisamente, en estas fechas  es cuando se suelen producir lo que popularmente se conoce como Mareas Vivas y si éstas coinciden con condiciones adversas como mar de fondo, se corre el riesgo, una vez más, de volver a vivir escenas trágicas fruto de que el mar sobrepase la avenida marítima de San Andrés llegando hasta las casas del barrio.