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Durante la pasada madrugada, la presidencia de la COP26 –en manos de Reino Unido– publicó un primer borrador del texto final. Ahora deben analizarlo los gobiernos nacionales para llegar a uno definitivo.
No es muy ilusionante este primer documento, creemos. Se podría resumir en mucho ruido y pocas nueces. Lo que hay sigue siendo insuficiente, y aún quedan muchos puntos clave sin tocar, como la financiación para los países en desarrollo.
La gran novedad es que –¡por primera vez!– se habla de eliminar los combustibles fósiles. Se puede ver como un gran avance, aunque es desmoralizador que algo tan obvio llegue en 2021. En este artículo analizamos el texto preliminar.
La décima jornada de la cumbre del clima ha tenido como temática el género. Y, como hemos explicado muchas veces, las mujeres son las más afectadas por el cambio climático.
Durante el día de ayer también se presentó un nuevo análisis de Climate Action Tracker, una de las instituciones más respetadas del mundo que se dedica a desgranar los planes climáticos de los países. Pues bien, nada nuevo –ni esperanzador–: incluso teniendo en cuenta los anuncios de la COP26 –y suponiendo que se cumplan a rajatabla, algo bastante improbable–, la temperatura subirá para finales de siglo entre 2,4 y 2,7 ºC. El estudio de la ONU de finales del mes pasado iba en la misma línea.
Aunque, bueno, después de la investigación publicada por el Washington Post, puede que nada de esto tenga sentido. Ayer analizamos el scoop del rotativo estadounidense. Lo que han descubierto ha hecho que muchos se lleven las manos a la cabeza: al parecer (falta una confirmación por parte de la comunidad científica) hay una enorme brecha entre las emisiones que declaran los países a la ONU y sus emisiones reales. Una brecha tan grande… como si hubiera otra China. Este desajuste trastocaría todos los planes climáticos, desde el Acuerdo de París y hasta la actual COP26. Terrorífico.
En resumen, la COP26 va llegando a su fin sin nada claro aún. La clausura oficial es el viernes por la tarde, aunque lo más seguro es que se alargue ante la falta de acuerdos. Toca seguir esperando (y presionando). Tic tac.
¡Hasta mañana!
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