El Gobierno del genuflexo Clavijo, "preocupado" por la situación de las camareras de piso
María Teresa Lorenzo, consejera del genuflexo Clavijo para las cosas del Turismo, le da la merecida cachetada a los empresarios hoteleros canarios en general y a Jorge Marichal muy en particular, recnociendo la angustiosa situación laboral de las camareras de piso. Un calvario que yo, Chema Tante, extiendeo, desde las sufridas y queridas "kellys" a todas las plantillas laborales de los establecimientos turísticos en las islas, que soprtan el abuso de las prolongadas jornadas laborales sin el pago correspondiente. Calvario que se prolonga a la legión de gente parada, que no encuentra trabajo por la sencilla causa de ese abuso a las personas que sí están contratadas. Pero la consejera del genuflexo, a pesar de reconocer el problema, sugiere una solución inane. Con lo que se pone, como no, al lado de las empresas abusadoras.
Propone Lorenzo, otra vez, digo, "que las personas maltratadas denuncien". Ahí le duele, consejera. Las personas víctimas de la sobrecarga laboral le tienen más miedo todavía al paro que las llevaría a la indigencia. Por eso no denuncian.
La solución está en la Inspección de Trabajo, que ahora no funciona. Y no funciona, no por culpa de las funcionarias y funcionarios que están ahí, sino porque no dan abasto. Porque hay poca gente. Lo que hay que hacer es aumentar ese número de profesionales en la Inspección de Trabajo. Y que actúen de oficio. Es simple. Se ponen en la puerta del personal de los establecimientos turísticos y comprueban las horas de entrada y salida de unas personas determinadas. Acto seguido, comprueban los contratos y nóminas. Les aseguro que no se llevarán ninguna sorpresa. Ninguna habrá trajajado lo que consta en el contrato ni lo que cobran. Y no hace falta que lo hagan con todas las personas que trabajan. Bastará con unos muestreos extensivos y con, por supuesto, meterle el notable puro correspondiente a las empresas infractoras. Al cabo del poco tiempo, se verá como desciende el paro. Claro que alguna o muchas empresas se tendrán que salir del mercado, porque sus sandios dirigentes no saben operar sino abusando laboralmente. Pero serán suplantados por otros emp`resarios que ´çsi sepan como se debe actuar.
Lo que pasa es que esto que estoy recomendando, nunca será aceptado por el genuflexo Clavijo, más sumiso ante las empresas a las que tanto debe, que ante la realeza.
http://eldia.es/canarias/2016-03-08/2-Gobierno-preocupado-situacion-camareras-piso.htm