Andrea Crisanti es un virólogo que se ha hecho famoso porque contuvo la avalancha del Coronaviruis en Lombardía, a base de test. Y el hombre lleva días gritando que atenuar el confinamiento es una locura. Y que todo se debe a las presiones económicas, pero supone un riesgo, en Italia y en España, muy grande. Y yo, Chema Tante, agrego que cómo le van a explicar a la gente si por apresurarse y levantar las medidas, el coronavirus vuelve, incluso antes de lo que ya se espera. Es que parece que no se han enterado de la magnitud y gravedad de este problema sanitarioi.
María Teresa Lorenzo, consejera del genuflexo Clavijo para las cosas del Turismo, le da la merecida cachetada a los empresarios hoteleros canarios en general y a Jorge Marichal muy en particular, recnociendo la angustiosa situación laboral de las camareras de piso. Un calvario que yo, Chema Tante, extiendeo, desde las sufridas y queridas "kellys" a todas las plantillas laborales de los establecimientos turísticos en las islas, que soprtan el abuso de las prolongadas jornadas laborales sin el pago correspondiente. Calvario que se prolonga a la legión de gente parada, que no encuentra trabajo por la sencilla causa de ese abuso a las personas que sí están contratadas. Pero la consejera del genuflexo, a pesar de reconocer el problema, sugiere una solución inane. Con lo que se pone, como no, al lado de las empresas abusadoras.
Álvaro Morales nos cuenta en EL DÍA que el consejero insular José Luis Delgado está "hondamente preocupado", por la caída en la carretera TF1 de un gran cartel señalizador. Tiene razones el consejero, para estar inquieto. Pero mejor sería que se hubiera angustiado a la hora de hacer el contrato de instalación. La foto la publica en FACEBOOK (Dónde se oculta el radar en Tenerife)
¿Por qué se insiste tanto en atacarla en vez de trabajar con ella, dentro o fuera de ella, que es lo mismo? ¿Por qué importa tanto que pueda llegar al poder y tan poco la acción y el programa para cambiar las cosas?