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viernes, 19 de abril de 2024 10:24h.

Por qué la muy probable fusión entre Bankia y CaixaBank sería una muy mala noticia para la economía española y en general para la ciudadanía - por Eduardo Garzón

 

frase eduardo garzón

Eduardo Garzón ofreció en TWITTER en forma de hilo este didáctico texto.

Por qué la muy probable fusión entre Bankia y CaixaBank sería una muy mala noticia para la economía española y en general para la ciudadanía - por Eduardo Garzón 

Hay cuatro razones fundamentales.

  1. La primera es que la concentración bancaria -que ya comenzó fuertemente en el año 2008- seguiría aumentando y dejaría todavía un menor número de bancos en nuestro país. Esto es un problema de manual porque cuantos menos competidores haya en el sector, más poder tendrán para imponer sus condiciones a sus clientes, es decir, a nosotros, y menos poder tendremos nosotros para evitar dichas condiciones (más comisiones, tipos más elevados, etc)concentración bancaria
  2. Cuanto más grandes son los bancos, más peligrosos son para la economía. Si quiebra un pequeño banco, el impacto económico es muy reducido, pero si quiebra uno grande, puede afectar al resto de bancos y provocar una quiebra generalizada, asestando un duro golpe a la economía.Por eso los bancos grandes saben que el Estado nunca los dejará quebrar, y eso los lleva a realizar acciones arriesgadas (que son las más rentables) sin preocuparse mucho de los problemas que conllevan para la economía, porque a ellos nunca les va a pasar nada.
  3. Esta fusión conllevaría muchos despidos, como ocurre en todas las fusiones y como ya vimos recientemente con el caso del Banco Popular. Se estima que se despedirán entre 10.000 y 15.000 empleados del sector de una plantilla total de 57.000 personas entre las dos entidades.Esto implica mayor tasa de paro y menores ingresos para estas personas y familias y por lo tanto menos consumo agregado para la economía (podrán gastar menos que antes).
  4. Supone una privatización de Bankia, pues la participación del Estado pasaría de ser de un 61,8% a no más de un 15% en el nuevo banco. Si se tiene más del 50% se controla la entidad, por lo que el Estado en este caso pasaría de ser protagonista a un simple personaje extra.  Algunos pensarán: ¿y por qué esto tendría que ser una mala noticia? Pues básicamente porque el Estado ha puesto mucho dinero público en Bankia (también en CaixaBank, pero es otro tema) y si ahora se marcha sin más, buena parte de ese dinero nunca lo recuperaríamos. En Bankia inyectamos 24.000 millones € de los que sólo se han recuperado 3.000. Si el Estado vendiera hoy su parte, ingresaría otros 3.000. Esto implica que habríamos perdido un total de 18.000 millones que nunca recuperaríamos porque el Estado ya habría abandonado el barco.

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Por eso, la fusión de Bankia y CaixaBank implicaría la pérdida de todo ese dinero y el abandono del control de la entidad para recuperarlo en algún momento o de poner la banca al servicio del interés general y no de unos cuantos accionistas privados.

En fin, la fusión disminuiría la competencia, perjudicaría los servicios bancarios ofrecidos, elevaría los riesgos del sistema, provocaría importantes despidos y supondría que perderíamos unos 18.000 millones de dinero público que pusimos en su día y que ya no recuperaríamos.

Profundizo sobre ello en mi canal:

https://www.youtube.com/watch?v=MBf4YWmbPQY&feature=youtu.be

 

*  Hilo publicado por Eduardo Garzón en TWITTER

EDUARDO GARZÓN RESEÑA

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