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viernes, 26 de abril de 2024 06:30h.

Ya nada me coge de sorpresa - por Isidro Santana León

Ya nada me coge de sorpresa con esta quinta columna creada por el colonialismo español, máxime cuando los promulgadores de la no participación electoral se presentaron anteriormente a varias elecciones.

Ya nada me coge de sorpresa - por Isidro Santana León *

Ya nada me coge de sorpresa con esta quinta columna creada por el colonialismo español, máxime cuando los promulgadores de la no participación electoral se presentaron anteriormente a varias elecciones. Me enviaron un discurso de Radio San Borondón, en el que la náusea y grima hacían mella en mi espíritu, al escuchar tanta hipocresía, oportunismo y perogrulladas. La conferencia fue un paseo simple, explicando la situación de Canarias (miles de folios, trabajos etc hay elaborados al respecto desde antaño, con una didáctica exquisita e investigación profunda y objetiva, cuando algunos de estos elementos no estaban en el independentismo o posiblemente estuvieran en CC o medrando con ella). Todo fue una plañidera de lo mal que nos va en la nación, del mal que han hecho a Canarias, de que nuestro pueblo tiene un problema psicológico y que la letra “Ñ” hay que suprimirla de nuestro habla como acto de rebeldía por ser una letra netamente española (cosa que no han hecho los países de latinoamericanos –estos la rebeldía la practicaron y practican combatiendo al enemigo de forma cruenta y en las calles–, sino que más bien se trata de una obtusa ocurrencia que el afamado psicólogo y creador de “Iglesias” quiere que pase a la historia con su cuño; ineptitud ésta que sí me parece una falta de autoestima o egopatía irreversible que, si cuaja, nos dejara vocalizando como toletes). Por el contrario, ninguno ha reconocido su mea culpa o hicieron una autocrítica con humildad, ya que nunca quisieron la unidad ni la cohesión nacional de la que acusan a otros y ahora quieren hacer gala.

Casualmente, fueron algunos de los ponentes miembros de la famosa y controvertida “Iglesia”; un prohombre que su grupo político lo compone él y su perro, además de otros grupúsculos que no representan a nadie. Después de que las oraciones a los santos guanches no les diera el resultado que engorda el narcisismo de algunos, y otras micro-estructuras domesticas y domesticadas que perdieron el pizco de protagonismo que tenían, se tuvieron que avenir a otros grupos antagónicos, con la nariz tapada, para estar en el Día de La Bandera Nacional y hacer acto de presencia. Todos los ponentes se opusieron en su momento a formar parte del CDTN (Consejo de Transición Nacional de Canarias), porque ninguno estuvo de acuerdo en ceder su protagonismo grupuscular en favor de la convergencia nacional. Tampoco se sabe nada del CDTN ni creo que aquí se vaya junto a ningún sitio, porque son los de siempre los que están en la cabeza intelectual de las taifas, mangoneando todo, para que nada se mueva.

He escrito algunos artículos que han levantado ampollas, pero la realidad está ahí: ¿por qué en más de treinta años no han querido la unidad y tienen la desfachatez de culpar al pueblo canario de su falta de preparación y compromiso político? ¿Dónde han estado escondidos en reuniones y más reuniones que no han servido sino como encuentro de amigotes? Cientos de proyectos que comenzaron para después reventarlos intencionadamente –caso sangrante fue el de la Mesa por la Descolonización e Independencia de Canarias, que se pudo convertir en ese Movimiento de Liberación tan necesario– creo que con la finalidad de crear la ilusión y euforia en la gente y después llevarlos a la frustración para que no se acerquen más por este independentismo sospechoso.

Yo siempre he sido un abstencionista… lo he sido porque no me siento español, no lo soy, y porque no hay un partido ni persona que me represente, además de que no colaboro con este sistema criminal de la metrópoli. Pienso que en mi tesitura estará mucha gente, se habla de unas estadísticas de 272.000 almas que no se sienten españoles… pues, bien, esa abstención que se da en Canarias por diversos motivos sociológicos, por lo visto la quieren rentabilizar estos marginales como actitud de rebeldía antiespañola o independentista: si toda esa gente estuviera dentro de un proyecto serio, entonces esto sería otra cosa.

¿Qué sacan con la abstención activa, crear desazón a España, nada más que eso…?, ¿y qué renta saca la “lucha soberanista” canaria, si no tiene, como dije antes, estructura, proyecto, táctica ni disciplina donde ubicar a los abstencionistas y poner en marcha a nuestro pueblo? Yo sí que lo sé: protagonismo para que los mismos de siempre se rodeen de cuatro acólitos que hasta les rinden pleitesía.

Anticipo que se volverán a enfrentar después del paripé abstencionista, porque todo lo están haciendo para no desaparecer como jefes de taifas. No hay remedio. Quizás una venidera generación tome las riendas del problema de Canarias y los deje con el culo al aire, más de lo que lo tienen, y si esa generación se pusiera en marcha, seguro que irían al acoso y derribo de ella. El mal de Canarias no sólo es el colonialismo exógeno, principalmente es el endógeno: ¡Ustedes!

Yo me pregunto… ¿cómo van a rentabilizar esa abstención si en Canarias no existe una gran estructura anticolonialista y, a la vista está, que, cuando hacen un llamamiento, uniéndose incluso grupos contranatura, no pasan de 200 almas?

* En La casa de mi tía por gentileza de Isidro Santana León