Ojalá que esto fuera realidad, pero lamentablemente es sólo un loable y puro deseo. Salvo una honrosa minoría, las bases del PSOE son el reflejo de sus dirigentes y siguen a éstos y apoyan sus decisiones (respetando la democracia están en su derecho), sin ningún cuestionamiento y menos aún oposición. La prueba más evidente fue la consulta que se le hizo, con relación al pacto suscrito con Ciudadanos para la investidura de Pedro Sánchez, que fue votado por 95.763 afiliados (51,7% de participación) y refrendado con 73.940 votos (78,97%) de la militancia y al que nos opusimos sólo 19.692 (21,03%) militantes.

Hay que recordar que a Ciudadanos, en la campaña electoral para las elecciones del 20-D, con toda razón el PSOE le criticaba como partido político de derechas y apéndice del PP, pero llegado el momento los jerarcas y dirigentes socialistas prefirieron pactar con ellos y buscando todo tipo de excusas no con Podemos y sus confluencias e Izquierda Unida, que tenían con 71 diputados, 31 más que la formación política de Albert Rivera, quien encima desde el día  siguiente que firmó el pacto, él y sus compañeros empezaron a desacreditar públicamente al Partido Socialista, exponiendo que el referido pacto no contemplaba (como así es, el término derogar ) las principales promesas que en la campaña electoral había hecho Pedro Sánchez: derogaciones de la Reforma Laboral, Ley educativa LOMCE (Ley del impresentable Wert) y de la  Ley de Seguridad Ciudadana (“Ley Mordaza”), como así mismo, revisar el articulo 135 de la Constitución para poder blindar los servicios públicos y sociales y la denuncia del Concordato con el Vaticano para que la Iglesia Católica Española, no continúe con sus privilegios y que España sea un estado laico y federal.

La decisión que adoptará el PSOE de cara a la investidura y formación de gobierno, Con toda probabilidad se hará en el seno del Comité Federal, máximo órgano entre congresos y que tiene las competencias en ésta materia. Éste órgano (sus miembros son elegidos en listas cerradas) está controlado por la gran baronesa y barones regionales. Pero puede que Pedro Sánchez por tantas presiones se vea obligado a dimitir, en cuyo caso se elegirá una gestora (lo más probable afin a los dirigentes),   que será la responsable de tomar la decisión que considere. También podría darse el caso de que igualmente mediante consulta, seamos los afiliados quienes volvamos a decidir la opción que estimemos más conveniente.

En cualquier caso y como suele ocurrir, la influencia y presión de los dirigentes será decisiva. En consecuencia y aunque me gustaría, pero no me siento optimista con lo que pueda pasar, al ver que los jerarcas y muchos dirigentes “socialistas” sin ningún pudor, se están decantando por el voto de abstención para que pueda gobernar el PP, un partido político que tiene la corrupción muy extendida plagado de facinerosos y que con prácticas mafiosas nos ha venido (y continua en funciones) gobernando.

Salud(os). Antonio Aguado Suárez

* En La casa de mi tía por gentileza de Antonio Aguado