AMEC exige la dimisión del Rector de la ULL Eduardo Doménech y de todo su equipo de Gobierno
Raúl Alonso (abogado caso AMEC): “Tengo plena confianza en que el TSJC ratificará en todos sus extremos la sentencia contra la ULL”
AMEC exige la dimisión del Rector Eduardo Doménech y de todo su equipo de Gobierno
Cabe recordar que varios miembros del colectivo se enfrentaron a la expulsión de la Universidad por emitir un comunicado en el que se quejaban de la lenta tramitación de las becas
SB-Noticias.- El colectivo estudiantil AMEC ofreció este miércoles una rueda de prensa en el Campus Central de la Universidad de La Laguna (ULL) para anunciar las medidas que adoptarán ante el recurso presentado por el rector del centro, Eduardo Doménech, contra la sentencia que deja sin efecto las sanciones impuestas a los alumnos que se quejaron públicamente de la lenta tramitación de las becas.
Cabe recordar que el Rector de la ULL trató de sancionar a los alumnos basándose en un código de conducta que data de la época franquista, cercenando de esta forma la libertad de expresión del alumnado. A pesar de que la Justicia ha dado la razón a los alumnos, Doménech pretende que este caso no se quede archivado.
Los portavoces del colectivo dijeron que desde el 2011 los integrantes de AMEC han sufrido una persecución sin precedentes en la ULL, pero también una persecución sin precedentes en la historia de la universidad española, no en vano desde el grupo de Gobierno liderado por Doménech se desató una auténtica cacería contra el estudiante crítico con las políticas lesivas del Rector.
De este modo, señalaron que a pesar de la sentencia judicial del pasado 5 de abril en el que se da razón al colectivo, anulando la resolución sancionadora impuesta contra AMEC, Eduardo Doménech ha decidido recurrir la sentencia pese a ser muy contundente contra los intereses de la Universidad, lo que no impide que el Rector sea incapaz de recocer una sentencia que pone en evidencia sus políticas represivas respecto a AMEC.
Afirmaron que la acción represiva contra el colectivo claustral, por extensión contra todo el movimiento estudiantil, ha quedado totalmente desvelada por esta clara y contundente sentencia. De este modo, indicaron que el discurso de Doménech contra el colectivo se advierte como una lacónica soflama revanchista, un discurso que pretendió silenciar desde el poder a las voces críticas del estudiantado, concretamente de los únicos que no le bailan al Rector.
Tras recordar que los alumnos de la ULL no votaron a Eduardo Doménech en las últimas elecciones al claustro, dejaron claro que desde el principio el Rector toleró esta cacería contra alumnos, dejando que el decano de la Facultad de Psicología convirtiera una simple nota de prensa de apenas 200 palabras en una cuestión de honor en la que se ponía en juego, según este dirigente universitario, la reputación de la Facultad y por extensión de la propia Universidad, lo que echa por tierra esta sentencia del 5 de abril.
Al respecto, indicaron que la sentencia deja claro que “en la comunicación litigiosa no se detecta ninguna expresión ofensiva o injuriosa, limitándose el comunicado a exponer unos hechos con el ánimo a que se mejore el servicio y se eviten perjuicios, una publicación hecha en el ejercicio legítimo del derecho del gobernado a controlar al gobernante, a la libertad de expresión e información, a la legítima crítica de la actuación de los poderes públicos y a la defensa de los derechos de los estudiantes por un grupo claustral”.
Para los representantes de AMEC, la cacería de la ULL contra sus componentes tenía como objetivo la destrucción de la oposición estudiantil contra las políticas que desmantelan la Universidad y que tienen en Eduardo Doménech uno de sus principales protagonistas y añadieron que con este acoso y avasallamiento nunca se pretendió esclarecer ninguna verdad, sino como ya dijeron antes la aniquilación total de la resistencia estudiantil.
Acusan al Rector y a su equipo de Gobierno de usar el dinero público de la Universidad para seguir persiguiendo a los estudiantes que forman parte de AMEC al recurrir una sentencia tan contundente que ha dejado al descubierto cómo actúa el peor Rector de la historia de la Universidad de La Laguna, dicho lo cual, como las políticas de Doménech han quedado claras ante los juzgados y ante la sociedad canaria desde AMEC exigen la dimisión de Eduardo Doménech, así como la de todo su equipo, especialmente la de su jefe de gabinete, Antonio Rodríguez Hernández, el jefe del servicio de inspección Andrés Falcón Armas y la del decano de psicología Pedro Avero Delgado.
Para finalizar, los estudiantes afirmaron que la Justicia ha dado la razón al poeta Pedro García Cabrera cuando en uno de sus poemas decía Un día habrá una isla que no sea silencio amordazado.
Raúl Alonso (abogado caso AMEC): “Tengo plena confianza en que el TSJC ratificará en todos sus extremos la sentencia contra la ULL”
Desde el punto de vista jurídico estamos ante una agresión de la ULL a derechos fundamentales protegidos en un Estado que se llama democrático
SB-Noticias.- Raúl Alonso, abogado de los estudiantes afectados, explicó en rueda de prensa la situación actual del conflicto AMEC-ULL desde el punto de vista jurídico. Explicó que la contundente sentencia contra las sanciones impuestas a los estudiantes deja claro que la Universidad vulneró derechos fundamentales como la libertad de expresión y abusó contra estudiantes, que no son estudiantes cualquiera, sino que son representantes del claustro universitario.
En este sentido, dijo que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº1 de Santa Cruz de Tenerife dio la razón en todos sus extremos a AMEC en su contencioso para anular las resoluciones que sancionaban a los alumnos de este grupo claustral, con un pronunciamiento absolutamente contundente al considerar que no ha habido ninguna lesión al honor de ningún miembro de la ULL como argumentó la Universidad para castigar a los alumnos.
De este modo, el letrado dijo que sencillamente se criminalizó desde la Universidad a los miembros de AMEC por decir que se había producido una negligencia administrativa en la tramitación de unas becas y explicó que hasta el momento se ha mantenido silencio en el caso por cautela porque tanto el grupo claustral como los servicios jurídicos querían ver qué reacción habría en el grupo de Gobierno de la ULL conocida la sentencia contraria a sus disparatadas y abusivas tesis, pero es que la reacción institucional es la de presentar un recurso de apelación, de tal forma que se ha emplazado al colectivo estudiantil a presentar la oposición a ese recurso de apelación y que resolverá el TSJC.
Dejó claro que tanto los servicios jurídicos como AMEC tienen plena confianza en que el TSJC va a ratificar en todos sus extremos la sentencia de Primera Instancia, dicho lo cual afirmó que desde el punto de vista jurídico estamos ante una agresión a derechos fundamentales protegidos en un Estado que se llama democrático, como es el de libertad de expresión.
Raúl Alonso dijo que no cabe duda de que los alumnos ejercieron su derecho a expresarse con libertad, sin caer en ningún caso en las injurias aludidas por el Rector de la ULL, pero añade que con las sanciones impuestas por la Universidad a los alumnos además se vulnera otro derecho, en este caso de control de las Administraciones públicas por los administrados, en este caso todavía más importante, el control que debe ejercer el claustro universitario sobre el ejercicio del gobierno universitario.
No hablamos de que se hayan violado derechos de estudiantes normales, a los que se deben respetar como es lógico sus derechos establecidos en la Constitución, sino que se ataca a la actuación de representantes claustrales que han actuado en todo momento sin traspasar los límites establecidos porque hablar de negligencia en tramitaciones de becas no es para nada injurioso y sí un ejercicio de defensa de los intereses de los alumnos que ese grupo claustral representa.
Ahora disponen de 15 días para interponer la oposición al recurso de apelación de la ULL, algo que harán con prontitud porque entienden que la sentencia tiene pocos visos de ser revocada dado que se trata de una sentencia jurídicamenre muy bien asentada.